MOSCÚ. — Moscú está muy insatisfecha con la reacción del alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, respecto al fusilamiento de los prisioneros de guerra rusos en la ciudad de Makéevka, declaró el viceministro de Exteriores ruso Serguéi Vershinin.
El 25 de noviembre Turk destacó que las circunstancias del fusilamiento de los prisioneros de guerra rusos en Ucrania deben ser objeto de una investigación exhaustiva y los responsables deben rendir cuentas.
«Decir que no estamos satisfechos con tal reacción del principal defensor de derechos humanos de la ONU es decir nada», dijo Vershinin en una entrevista con Sputnik.
Asimismo subrayó que Rusia califica la evaluación de Turk «de las atrocidades de los militares ucranianos de inadecuada y su posición respecto a la tragedia de cínica y sin principios».
La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos no presentó reacción ulterior, lamentó el vicecanciller ruso.
A pesar del hecho, continuó, Rusia seguirá tratando de lograr «una condena rigurosa y de principio del alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, así como de los organismos especializados de la OSCE a las acciones de los castigadores ucranianos».
El 18 de noviembre, en internet apareció un vídeo en el que los ucranianos disparan a varios prisioneros rusos en la cabeza. El presidente del Consejo Presidencial ruso para los Derechos Humanos, Valeri Fadéev, dijo que es un asesinato de carácter «demostrativo» y aseguró que exigirá abrir una investigación internacional.
También declaró que Moscú enviará el vídeo de la ejecución de los prisioneros rusos en la ciudad de Makéevka a varias organizaciones internacionales, como la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, el Consejo de Europa, Amnistía Internacional y el Comité Internacional de la Cruz Roja.
(Sputnik)