Fuertes combates por el control de la ciudad industrial de Severodonietsk

Kiev. Tropas rusas y ucranias libraron intensos combates ayer por la estratégica Severodonietsk, aunque ambas partes reivindicaban triunfos en la batalla por esta ciudad industrial, dominada parcialmente por Moscú.

El Ministerio de Defensa ruso aseveró que las unidades del ejército ucranio, tras haber sufrido pérdidas críticas en los combates por Severodonietsk, de hasta 90 por ciento en varias unidades, se están retirando a Lysychansik.

“Las autoridades ucranias, conscientes de que era imposible resistir y conservar la zona industrial de Severodonietsk, ordenaron a un grupo táctico mixto minar unos depósitos de la fábrica Azot de nitrato y de ácido nítrico”, detalló en un comunicado.

El ministerio no dio más detalles sobre el número de militares ucranios que dejaron la ciudad. La agencia Afp no pudo verificar de forma independiente estas afirmaciones.

En el comunicado se precisó que este grupo está formado por “supervivientes” de la 79 brigada de asalto aéreo y de miembros de la defensa territorial ucrania. Moscú afirmó que las fuerzas ucranias quieren explotar estos tanques con productos químicos para contaminar la zona y “retrasar” la ofensiva de tropas rusas.

Serguéi Gaiday, gobernador de la provincia de Lugansk, señaló que las brigadas rusas sufrieron graves derrotas en Severodonietsk, pero reconoció que destruyeron puentes para evitar que se envíen refuerzos, alimentos y medicinas.

“En este momento, nuestros soldados los han hecho retroceder, ellos (los rusos) están sufriendo enormes bajas”, afirmó ayer Gaiday en una transmisión televisiva en vivo.

Destruyen puentes

“El ejército ruso, según tenemos entendido, está lanzando todos sus esfuerzos, todas sus reservas en esa dirección. Los rusos están volando puentes, por lo que no pudimos traer refuerzos a nuestros chicos en Severodonietsk”, detalló.

El gobernador declaró que las tropas de su país habían recuperado alrededor de una quinta parte del territorio que habían perdido en la ciudad.

Los efectivos intentan “restablecer (…) el control total” de la ciudad industrial, afirmó Olexandre Striuk, alcalde de Severodonietsk.

“Hubo un cierto éxito” de las tropas rusas “que lograron entrar en la ciudad y hacerse con el control de buena parte de ella, dividiéndola en dos”, indicó en una entrevista difundida en Telegram.

“Pero nuestros soldados consiguieron desplegarse de nuevo y construir una línea de defensa. Actualmente, hacemos todo lo posible para restablecer el control total de Ucrania” en la ciudad industrial, añadió.

El Estado Mayor ucranio también indicó que “los combates continúan por el control total de Severodonietsk”, en una rueda de prensa anoche, en que no dio más detalles.

Los soldados rusos también intentaron avanzar hacia Lysychansik, al otro lado del río Síverski Donets, desde Severodonietsk, pero fueron detenidos, agregó.

Ambos bandos han sufrido pérdidas importantes en las batallas calle por calle por la ciudad industrial de la era soviética, donde las carreteras han quedado cubiertas de cráteres y vehículos destruidos.

Si Severodonietsk cae, la vecina Lysychansik sería la última ciudad que Rusia necesita capturar para tener el control total de la provincia de Lugansk, que junto con la provincia de Donietsk conforman el Donbás.

La zona se ha convertido en el foco de la invasión rusa, mientras el presidente Vladimir Putin intenta recuperar el impulso tras el intento fallido de tomar la capital, Kiev.

El Ministerio de Defensa británico afirmó que la actividad aérea rusa sigue siendo elevada sobre Donbás, con aviones rusos que llevan a cabo ataques con munición guiada y no guiada.

En Donietsk, Vadim Liaj, alcalde de la ciudad de Sloviansk, denunció que hasta 25 mil civiles continúan en la ciudad bajo “constantes bombardeos” de las fuerzas rusas y sin suministro eléctrico y de agua.

Sloviansk es la principal base de las fuerzas armadas ucranias en la región y si Rusia toma esta ciudad sería un importante punto de inflexión en la guerra.

“Se rompen como nueces”

Por otra parte, el Ministerio de Defensa de Rusia indicó que sus fuerzas derribaron un avión de transporte militar que llevaba armas y municiones cerca del puerto de Odesa en el Mar Negro.

Putin destacó en una entrevista con la televisión pública Rossiya 1 la labor de sus equipos antiaéreos que están derribando por “docenas” las armas enviadas por los países occidentales a Ucrania. “Se rompen como nueces. Decenas de ellas han sido destruidas”.

El ejército ruso ha acabado con las vidas de más de 400 “nacionalistas ucranios” y destruido toneladas de armamento durante los bombardeos en las últimas 24 horas, anunció el portavoz del Ministerio de Defensa, Igor Konashenkov.

Buena parte del daño ha sido causado por un bombardeo contra un centro de entrenamiento de artillería de las fuerzas armadas de Kiev en la región de Sumy, en el noreste del país.

Ucrania anunció la muerte de cuatro combatientes voluntarios procedentes de Alemania, Países Bajos, Australia y Francia que luchaban contra las fuerzas rusas.

En tanto, la iglesia de madera de un famoso monasterio ortodoxo del este de Ucrania quedó destruida tras ser impactada por un nuevo bombardeo ruso, indicó el presidente ucranio, Volodymyr Zelensky.

Cuatro personas han muerto y cuatro más han resultado heridas de gravedad, aunque Rusia asegura que fueron los “nacionalistas ucranios” los responsables del ataque.

El asesor presidencial ucranio, Mijailo Podoliak, estimó que la invasión en Ucrania podría prolongarse hasta seis meses más dependiendo del tamaño de los arsenales ucranios y de la postura de la comunidad internacional sobre el respaldo militar.

Afp, Reuters y Europa Press