Por David Gómez
Doha acogió este jueves una reunión impulsada por Estados Unidos, Egipto y Catar para una propuesta final de alto al fuego en Gaza, pero Hamás no acudirá. Mientras tanto, Israel se prepara para un ataque inminente de Teherán y Hezbolá.
¿Qué tienes que saber?
- Hamás aceptó en junio un plan de paz presentado por Joe Biden. La propuesta anunciada por el presidente de Estados Unidos en la ONU constaba de tres fases, en las que preveía un alto al fuego permanente, la liberación de todos los rehenes israelíes y la reconstrucción de Gaza.
- Pero las opciones de acuerdo se han reducido. Los islamistas acusan al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de retrasar el pacto con nuevas exigencias. Israel demanda reanudar los combates tras una tregua, mantener el control del cruce en Rafah y un mecanismo internacional que impida la transferencia de armas al norte de Gaza.
- Hamás no estará en las ronda final de conversaciones del jueves en Doha. Justifica su decisión por las nuevas demandas de Netanyahu, la continuación de los ataques israelíes en Gaza y el asesinato de su líder político, Ismail Haniya, a manos de Israel. Tel Aviv sí enviará una delegación, pero Netanyahu sigue reclamando la derrota total de Hamás.
- La inteligencia estadounidense prevé un ataque inminente de Irán y Hezbolá en Israel. Teherán prometió represalias tras el asesinato de Haniya en su territorio. Hezbolá también amenazó con responder a la muerte de su líder militar en un bombardeo israelí en Beirut.
Irán ya sabe lo que es atacar en territorio de Israel: lo hizo en abril después de que el Ejército israelí bombardeara su consulado en Damasco. Descubre el arsenal de misiles iraní y su alcance en este mapa.
¿Por qué es importante?
- La cumbre de Doha pretende reimpulsar las negociaciones de paz en Gaza. Estados Unidos, Egipto y Catar buscan agilizar las conversaciones ante el riesgo de escalada regional. A los demócratas les interesa cerrar el conflicto antes de las elecciones estadounidenses. Sin embargo, la ausencia de Hamás refleja la creciente tensión con Israel.
- La ralentización de las negociaciones es el objetivo de Netanyahu. El primer ministro busca ganar tiempo por si Donald Trump regresa a la Casa Blanca en noviembre. También pretende mantener el apoyo de sus socios ultraderechistas al no ceder con Hamás.
- El posible ataque de Irán y Hezbolá condiciona la cita. Ambos buscan golpear a Israel en su territorio para disuadirlo de futuras ofensivas. Sin embargo, la magnitud del ataque puede hacer fracasar las negociaciones por completo y desatar una guerra en Oriente Próximo.
¿Qué cabe esperar?
- Es impensable que haya un acuerdo de paz entre Israel y Hamás a corto plazo. Ni Netanyahu ni los islamistas están por la labor de alcanzar un pacto. Sin Hamás, las conversaciones en Doha no supondrán ningún avance.
- El ataque de Irán y Hezbolá contra Israel sucederá. La pregunta es cómo y cuándo. Una ofensiva coordinada antes de la cumbre lanzaría un mensaje de fuerza por parte de Teherán. Sin embargo, Irán sabe que hará descarrilar cualquier proceso de paz y alimentará el riesgo de una guerra a gran escala que no desea.
- El fracaso de las negociaciones debilitará la posición de los mediadores. Estados Unidos seguirá enfangándose en un conflicto que perjudicará las aspiraciones electorales de Kamala Harris. Por su parte, Egipto teme que se eleve la presión sobre su frontera oriental del Sinaí.
Las tres claves:
- La ofensiva ucraniana en Rusia tiene mucha importancia simbólica. Se trata de la primera incursión en suelo ruso desde la Segunda Guerra Mundial. Con ella, Ucrania pone en evidencia a Moscú por descuidar sus fronteras al concentrar sus recursos en el Donbás. También hace ver que Putin no cumple sus líneas rojas.
- Los avances en territorio ruso han permitido a Ucrania recuperar la iniciativa. Tras el fracaso de su contraofensiva en 2023, Rusia había ganado terreno en el Donbás. La incursión ucraniana supone un impulso anímico para Kiev y alivia la presión en el frente oriental.
- Pero la ofensiva en Rusia también entraña riesgos para Ucrania. El ataque puede exponer a sus defensas en el Donbás, por lo que es difícil que puedan sostener la operación a largo plazo. Pese a ello, Kiev ya ha logrado su propósito: sorprender a Rusia y mostrar sus vulnerabilidades.
Donald Trump pasa al ataque
El candidato republicano para las elecciones presidenciales de Estados Unidos busca recuperar la iniciativa en la campaña tras perder el liderato en las encuestas. Los demócratas están al alza con la elección de Kamala Harris.
Las tres claves:
- Trump ha vivido el peor mes de su campaña. Las dudas sobre el estado de salud de Biden y el fallido intento de asesinato contra él habían disparado sus opciones de victoria. Sin embargo, el reemplazo de Biden por Harris, unido a sus salidas de tono y a las de su candidato a vicepresidente, J.D. Vance, le han erosionado.
- La iniciativa la lleva ahora Kamala Harris. Encabeza las encuestas en la mayoría de estados en disputa y espera darse un baño de masas en la Convención Nacional Demócrata de la próxima semana. Su elección ha descolocado a Trump, que ya no puede jugar su gran baza con Biden: la edad.
- Trump ha comenzado su ofensiva contra Harris. El expresidente regresó el lunes a X –anteriormente Twitter– en una entrevista con Elon Musk, y la calificó como radical y poco inteligente. Centró sus ataques hacia ella en su tema preferido: la gestión de la inmigración.