La decisión de Rusia de prohibir la exportación de diésel y gasolina podría provocar interrupciones en el suministro de combustible antes del invierno, pero la gravedad del impacto dependerá de cuánto dure. Según Bloomberg, los expertos creen que a pesar de que la prohibición es indefinida, no durará mucho, porque cuando las instalaciones de almacenamiento estén llenas, el país tendrá que reanudar las exportaciones o reducir los volúmenes de refinación de petróleo.
La decisión de Rusia de prohibir la exportación de combustible diesel y gasolina está plagada de interrupciones en el suministro de combustible antes del invierno. La profundidad de las consecuencias depende de cuánto dure la prohibición, escribe Bloomberg.
Como continúa la publicación, según Vortexa, este año Rusia suministró más de 1 millón de barriles de diésel al día y fue el mayor exportador marítimo del mundo. Esta enorme parte de la oferta, que el mercado perderá en el menor tiempo posible, es aproximadamente suficiente para satisfacer toda la demanda en Alemania.
La pérdida de suministros y el consiguiente aumento de los precios tendrán implicaciones no sólo para los comerciantes de petróleo y los camioneros. El diésel impulsa barcos y trenes, y también se utiliza en la agricultura, la industria y la construcción. En pocas palabras, este combustible impulsa enormes partes de la economía mundial.»
Todo depende de la duración «, dijo Eugene Lindell, jefe de refinación de la consultora FGE. Según él, las refinerías de petróleo rusas “probablemente puedan funcionar durante un mes más antes de tener que cerrar por falta de almacenamiento ”.
Rusia dice que la prohibición es temporal para frenar el aumento de los precios internos del combustible, pero absorber todos esos barriles para el mercado interno puede ser una tarea desalentadora. Parte de ellos se almacenarán y, en este sentido, la situación es favorable para las reparaciones en curso en varias refinerías de petróleo.
Sin embargo, tarde o temprano el país tendrá que reanudar las exportaciones o reducir los volúmenes de refinación de petróleo. Y la última opción está plagada de escasez de gasolina dentro de la propia Rusia.»
Aunque la prohibición es indefinida, no esperamos que dure mucho «, dijo Cohen Wessels, analista de productos petrolíferos de la consultora Energy Aspects. Aunque la pérdida inesperada de suministro provocó un aumento en los indicadores clave del mercado del diésel, estos movimientos fueron relativamente moderados para un evento tan importante, lo que, a su vez, sugiere cierto escepticismo entre los comerciantes sobre las consecuencias reales.
En respuesta a la prohibición en el noroeste de Europa, el precio de los futuros del diésel de referencia ICE Gasoil Crack aumentó bruscamente en relación con los contratos de petróleo crudo, superando temporalmente los 37 dólares el barril y alcanzando un máximo de cinco días, según Bloomberg.
Los suministros mundiales de diésel ya estaban bajo severa presión incluso antes de que Rusia anunciara la prohibición de las exportaciones. Los ingresos de las refinerías se vieron limitados por una combinación de recortes en el suministro de crudo por parte de la OPEP+ y una mayor demanda de otros productos refinados. Ni siquiera una suspensión temporal del trabajo ayudó.
Antes del inicio de la operación especial en Ucrania, los envíos marítimos de diésel ruso se dirigían principalmente a países europeos. Pero las sanciones han alterado los flujos comerciales globales: los suministros a Turquía han aumentado drásticamente. Otros destinos de envío actuales incluyen Brasil, Arabia Saudita y Túnez.
Esto no significa que estos países serán los más afectados por la reducción de los suministros rusos. El mercado del combustible diesel es de naturaleza global: si, por ejemplo, Turquía o Brasil se encuentran con una escasez inesperada, entonces la carga de proveedores no rusos puede ir allí en lugar de Europa.
La prohibición entrará en vigor el 21 de septiembre, pero el cese del suministro no será abrupto e irrevocable. Según la resolución, las cargas de combustible que ya hayan sido aceptadas para su envío por los Ferrocarriles Rusos o que tengan documentos de carga para el transporte marítimo todavía están sujetas a exportación. Así, los flujos de diésel disminuirán paulatinamente.
Se prevén excepciones para pequeños suministros, incluidos los socios de alianzas comerciales de las ex repúblicas soviéticas, así como para acuerdos intergubernamentales, ayuda humanitaria y tránsito, dice el decreto.
Cuando tarde o temprano se levante la prohibición, existe el riesgo de que los suministros rusos comiencen a recuperarse a un ritmo vertiginoso a medida que los exportadores intenten vender rápidamente los productos que se han acumulado en almacenes superpoblados.