BOSTON, 29 de julio (Reuters).- La vicepresidenta Kamala Harris ha mostrado su lado agresivo durante una gira por casi una docena de estados de EE.UU, criticando las nuevas leyes restrictivas sobre el aborto y movilizando a los latinos en Chicago para luchar contra los republicanos “extremistas”.
Hoy, Harris, la primera mujer y la primera mujer de color en ocupar el cargo de vicepresidenta, abre la conferencia anual de la NAACP en Boston, un evento político clave para los afroamericanos que ayudará a definir los temas en los que se centrarán los demócratas en las elecciones de 2024.
Los discursos de alto perfil son parte de un papel ampliado para el socio gobernante muy analizado del presidente de EE. UU. Joe Biden antes de las elecciones, dicen los demócratas de alto nivel. Participará en muchos más eventos de estilo de campaña en los próximos meses, diseñados para volver a familiarizar a Harris con seguidores leales, pulir su imagen con los independientes y llegar a los demócratas que no han escuchado el mensaje de la administración Biden.
La vicepresidenta Kamala Harris ha mostrado un lado contundente, atacando al gobernador de Florida, Ron DeSantis, por respaldar la «historia revisionista» sobre la esclavitud, diciéndoles a los trabajadores de la salud de Iowa que se rebelen contra las nuevas leyes restrictivas de aborto del estado y reuniendo a los latinos en Chicago para luchar contra los republicanos “extremistas”.
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