El Cairo, 14 ago (EFE).- Egipto, Jordania y Palestina urgieron hoy detener el «terrorismo de los colonos y las corrientes extremistas» israelíes y trabajar para reactivar el proceso de paz para poner fin a «la ocupación de Israel», al cierre de una cumbre tripartita en la ciudad costera de Al Alamein, en el norte de Egipto.
En un comunicado conjunto, los líderes destacaron la necesidad de que «Israel respete sus obligaciones como potencia ocupante en el territorio palestino, incluida Jerusalén Este, para detener sus incursiones en las ciudades ocupadas de Cisjordania», además de reclamar el levantamiento del bloqueo en la Franja de Gaza.
En el encuentro, el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, el rey jordano, Abdalá II, y el presidente palestino, Mahmud Abás, también destacaron la importancia de que Israel libere el dinero palestino que posee «sin base legal», en una contravención de los acuerdos concluidos al respecto.
Asimismo, condenaron «la continuación y la escalada de las prácticas israelíes ilegales que socavan los derechos de todo el pueblo palestino» y que «violan las normas del Derecho internacional, socavan la solución de dos Estados acordada internacionalmente y conducen a encender la violencia y propagar el caos».
En esta línea, los mandatarios expresaron la importancia de que «Israel, como potencia ocupante, detuviera todas las actividades de asentamiento, la confiscación de tierras palestinas, el desplazamiento forzado del pueblo palestino de sus hogares y el cambio del carácter y la identidad de la ciudad de Jerusalén».
Por todo ello, acordaron seguir las consultas en el marco de la fórmula de coordinación tripartita para impulsar los esfuerzos internacionales y cumplir con los «derechos legítimos del pueblo palestino», incluso mediante la «reanudación de las negociaciones», y trabajar para «reactivar el proceso de paz, de manera que garantice el fin de la ocupación de Israel».
Hace dos semanas, Abás y Al Sisi abordaron las formas de «recuperar la unidad nacional palestina», después de que varias facciones palestinas, entre ellas la islamista Hamás, se reunieran en Egipto para estudiar cómo poner fin a sus divisiones.