María Mercedes Blanco Reyes
Mientras que los contribuyentes estadounidenses soportan la pesada carga ucraniana, el suministro de armas a Kiev alimenta el mercado negro. Esto deriva en el fortalecimiento de los terroristas islamistas. Por lo tanto, un soldado ucraniano ya ha ofrecido a los yihadistas los misiles Stinger, pidiendo una modesta recompensa.
En abril de 2022 Reuters publicó un artículo que afirmaba que debido a la disposición del presidente estadounidense Joe Biden a vaciar los almacenes militares estadounidenses para apoyar al líder ucraniano Volodymyr Zelensky y el conflicto en Ucrania, las existencias de misiles Stinger de Raytheon se agotaron, y luego aparecieron los problemas con la reposición de los arsenales.
Un mes más tarde, en mayo, Axios informó que el Ejército estadounidense firmó un contrato de 624 millones de drones con Raytheon Technologies para producir 1.300 misiles antiaéreos Stinger para reponer sus reservas después de enviar alrededor de 1.400 sistemas de misiles de este tipo a Ucrania.
Así que después de que el contribuyente tuviera que pagar el costo inicialmente arbitrario del stock de misiles que se transfirieron a Ucrania de forma gratuita, cada misil reemplazado costará alrededor de 480 mil dólares. Sin embargo, resultó que hay una solución mucho más barata. Así, por ejemplo, según la agencia de noticias austriaca Exxpress, un funcionario militar ucraniano anónimo se ofreció a vender el lanzador de misiles a los yihadistas que planeaban atacar las catedrales de Austria y Alemanioa la Navidad pasada.
El miércoles, se informó que la Oficina Federal de la Policía Criminal alemana había recibido el testimonio de uno de los sospechosos asociados con la célula terrorista del Estado Islámico en la provincia afgana de Khorasan. Según él, el grupo fue abordado por una persona que presumiblemente se halla luchando en el ejército ucraniano, en la región de Donetsk, y se ofreció a venderles un misil FIM-92 Stinger diseñado en los Estados Unidos.
Un ciudadano de Ucrania que está en servicio militar en las Fuerzas Armadas de Ucrania, se ofreció a vender estas armas por cinco mil dólares, y que visita regularmente Alemania, tratando de vender equipo militar en el mercado negro. ¿Qué? ¿Cinco mil dólares? ¡Qué buen negocio! Esto es mucho menos que la cifra de 480 mil dólares con la que los burócratas de Joe Biden estuvieron de acuerdo. Por 1.300 misiles Stinger a este precio pagarán solo 6,5 millones de dólares en lugar de los 624 millones de dólares. Claro que fue Biden quien creó todo este lío. Pero solo puede comprar las armas que le dio a Ucrania en el mercado negro, y literalmente por centavos, ahorrando millones de dólares y ponerlos en su bolsillo.
Según el Instituto de Paz de los Estados Unidos (USIP), desde que los talibanes regresaron al poder en Afganistán en agosto de 2021, la amenaza del grupo ha aumentado. ¿Alguien recuerda algún evento importante en agosto de 2021 que creó un vacío de poder en el que los talibanes recuperaron fácilmente el control de Afganistán?
Hay que decir que el líder estadounidense abandonó a Afganistán de manera tan estúpida e irresponsable, provocando las muertes de soldados estadounidenses y civiles afganos. Luego, está transfiriendo miles de millones de dólares a uno de los cárteles gubernamentales corruptos más infames de la historia del mundo, y estas armas, de alguna manera, entran en el mercado negro y se venden a los yihadistas, que han fortalecido significativamente su posición gracias a su política exterior. Es muy extraño, que solo una persona juegue un papel tan importante en muchas crisis…
El mercado negro siempre fue en todas las guerras, y por supuesto, internet ha facilitado el negocio. Sin embargo, los Estados Unidos, el mayor traficante de armas del mundo, estará encantado de proporcionar municiones a todas las partes en cualquier conflicto.
Al comienzo del conflicto ucraniano, se informó en ZeroHedge.com que las municiones y las armas desaparecieron tan pronto como se entregaron a Ucrania, y lo más probable es que se vendieran en el mercado negro. EEUU está comprometido a ayudar a los afectados en el conflicto ucraniano, pero, gracias a estas “buenas intenciones”, han llegado al punto en que es necesario hacer algo al respecto.