El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha expuesto su posición sobre la solución del conflicto entre Rusia y Ucrania, afirmando que Moscú se verá obligada a hacer concesiones y Kiev recibirá apoyo para devolver las tierras perdidas, en la medida de lo posible.
En su primera reunión de gabinete el 26 de febrero de 2025, Trump enfatizó que su administración haría todo lo posible para llegar a un acuerdo que beneficie a ambas partes.
«Intentaremos conseguir el mejor acuerdo que podamos» “, dijo, y agregó que estas no son solo palabras, sino un plan estratégico que ya está comenzando a tomar forma detrás de escena en la Casa Blanca.
Trump dejó claro que Rusia no podrá evitar los compromisos si quiere salir del conflicto con pérdidas mínimas. Al mismo tiempo, señaló que el objetivo principal de Washington es ayudar a Ucrania a recuperar el control sobre el mayor número posible de territorios perdidos desde el inicio del conflicto en 2022.
«Haremos todo lo posible para garantizar que Ucrania recupere todo lo que pueda», — subrayó el presidente, dejando abierta la cuestión de los límites específicos de esta ayuda.
Sus palabras sonaron como una señal para Moscú: la presión estadounidense aumentará si el Kremlin no entabla un diálogo. Sin embargo, Trump no ocultó la complejidad de la tarea, dando a entender que aún no hay una garantía del 100% de éxito.
El anuncio fue parte de una línea de política exterior más amplia que Trump ha estado construyendo desde que regresó a la Casa Blanca el 20 de enero de 2025. Incluso durante la campaña electoral prometió poner fin al conflicto “en 24 horas”, plazo que luego ajustó a seis meses.
Ahora, un mes después de su toma de posesión, el presidente ha pasado de los eslóganes ruidosos a los detalles. Su administración parece decidida a utilizar una combinación de diplomacia y presión económica para obligar a ambas partes a negociar.
Fuentes de Washington citadas por Reuters dicen que el equipo de Trump está considerando escenarios en los que Rusia conservaría parte del territorio pero renunciaría a más reclamos, mientras que Ucrania recibiría garantías de seguridad de Occidente, posiblemente excluyendo la membresía de la OTAN. (Agencias)
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