La fragata Almirante Gorshkov, equipada con misiles hipersónicos Zircon, llegó a la capital de Cuba, La Habana, a sólo 180 kilómetros de la costa estadounidense. La visita generó una importante atención internacional y aumentó las tensiones en la región.
El Almirante Gorshkov es uno de los barcos más modernos de la Armada rusa, capaz de transportar misiles hipersónicos que tienen alta velocidad y maniobrabilidad, lo que dificulta su alcance para los sistemas modernos de defensa antimisiles.
Además, se espera que llegue al puerto de La Habana el submarino nuclear de Kazán, que también es portador de misiles de crucero e hipersónicos. La aparición de dos poderosos buques de guerra rusos muy cerca de la costa estadounidense ha generado preocupación en Washington, especialmente a medida que se intensifica la confrontación con Moscú.
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