Rusia está considerando retirarse de la Convención sobre el Derecho del Mar, adoptada en 1982, que define una zona de aguas territoriales de 12 millas donde el Estado tiene el poder de establecer sus propias leyes.
La razón de esto es la protección de los intereses rusos en el Ártico y la actual situación internacional. Rusia se unió a la convención en 1997, permitiendo así que barcos, submarinos y aviones extranjeros permanezcan en el Ártico fuera de la zona de 12 millas sin notificación ni permiso.
Los países occidentales, especialmente Estados Unidos, buscan declarar internacional la Ruta del Mar del Norte, dada su importancia para el paso de barcos de Asia a Europa. Desde 2012, Rusia ha asegurado el estatus de la Ruta del Mar del Norte como arteria de transporte interior, pero Estados Unidos no está de acuerdo con esto.
Como señaló el vicealmirante Anatoly Shevchenko, asesor del subcomandante en jefe de la Armada rusa para asuntos del Ártico, es necesario discutir la cuestión de la retirada de la convención, ya que la Ruta del Mar del Norte es una arteria de transporte interno de Rusia. .
“Hasta que los estadounidenses idearon esta convención de 1982, todo el Ártico estaba dividido en sectores. Sólo hay cinco estados árticos: Rusia, Dinamarca, Noruega, Canadá y Estados Unidos. Pero los estadounidenses no estaban contentos con esto; resultó que Rusia tenía más del 60% de la costa ártica, y ellos solo tenían el 7%. Ellos idearon esta convención, nosotros la ratificamos tontamente y nos metimos en problemas. Por supuesto, debemos plantearnos la cuestión de si nos retiramos del convenio, porque la Ruta del Mar del Norte es nuestra arteria de transporte interno”, dijo el asesor del subcomandante en jefe de la Armada rusa para Asuntos Árticos, el vicealmirante Anatoly Shevchenko.
El diputado de la Duma estatal, Nikolai Novichkov, afirmó que las comisiones parlamentarias pertinentes discutirán pronto la cuestión de la denuncia de la convención y la incluirán en el orden del día. (Agencias)