El presidente chino insta al Ejército a reforzar los planes de guerra y aumentar su preparación para la batalla real, en medio de tensiones con EE.UU. por Taiwán.
Durante una inspección de la sede del Comando del Teatro de Operaciones Oriental del Ejército Popular de Liberación (EPL), en la provincia oriental de Jiangsu, el presidente chino declaró el jueves que la seguridad del gigante asiático afronta una creciente inestabilidad e incertidumbre, a medida que el mundo se adentra en nuevo periodo de turbulencia y transformación, según la agencia de noticias local Xinhua.
En ese sentido, hizo un llamado a vigilar los peligros potenciales y pidió mejorar los planes de guerra y combate, así como intensificar el entrenamiento en condiciones reales de batalla con el fin de fortalecer las capacidades de las fuerzas para luchar y ganar.
Xi recalcó que las Fuerzas Armadas deben tener el coraje y la capacidad de luchar y salvaguardar resueltamente la soberanía nacional, la seguridad y los intereses en desarrollo.
Aunque el mandatario chino no citó a ningún país, Pekín ha denunciado en numerosas ocasiones la asistencia militar de EE.UU. a Taiwán, asegurando que esto viola el principio de ‘una sola China’ e infringe seriamente la soberanía y la integridad territorial del país.
El miércoles, China condenó la aprobación por el Departamento de Estado de EE.UU. de dos acuerdos separados de venta de armas y equipos militares a Taiwán por un valor de 440 millones de dólares.
Las tensiones entre China y EE.UU. están en su nivel más alto en los últimos años, entre otras cuestiones, por el apoyo estadounidense a Taiwán en actividades como la venta de armas y las visitas de funcionarios norteamericanos a la isla.
Pekín ha instado en varias ocasiones a Washington a respetar el principio de ‘una sola China’, poner fin a sus lazos militares con Taiwán y la venta de armas a la isla, así como dejar de lado las medidas que pueden socavar la seguridad del estrecho taiwanés. Además, ha alertado que EE.UU. pagará un “precio insoportable” por la travesura en la zona.
El pasado mes de octubre, el presidente chino reiteró el compromiso de Pekín con el avance en el proceso de reunificación pacífica con Taiwán, sin descartar por completo la posibilidad del uso de la fuerza. (Agencias)