Son las 5 de la tarde el 4 de septiembre de 2024 en Santuario de Mamíferos Marinos en Estero Hondo, Puerto Plata. Dos pescadores caminan entre los manglares con un chinchorro sobre los hombros de uno de ellos.
Saben que ya no debería haber acceso a turistas a la zona y que los guardaparques del área protegida se han retirado o se preparan para irse.
A las 5:30 abren la red y la empiezan a cerrar lentamente en busca de peces, mientras se observa un grupo de manatíes en los alrededores.
Están pescando frente a la torres de observación de manatíes, en el núcleo del área protegida. No saben que se les está observando con un dron.
En la pantalla se puede ver a un manatí a menos de dos metros de la red y de pronto se aleja, estresado, del lugar, dejando un rastro de sedimento por los fuertes coletazos durante la huida.
Se avisa al administrador del área protegida, quién hace presencia en el lugar y constata la actividad de los pescadores dentro de la zona. Solicita que le haga fotografías a ambos pescadores para identificarlos y posteriormente someterlos a la justicia.
Los pescadores, al notar la presencia del dron, recogen rápidamente la red y escapan de la zona entre los manglares.
En la pantalla se puede ver a dos dominicanos de mediana edad, a los cuales el administrador no reconoce en las fotografías, pero supone que son de las comunidades cercanas.
A pesar de haber sorprendido a los pescadores en franco delito, los guardaparques no pueden perseguirlos. No tienen embarcación, solo un motor fuera de borda asignado por el Ministerio de Medio Ambiente. Cuando logran conseguir una embarcación, ya los pescadores han escapado.
Las imágenes son enviadas inmediatamente al Viceministerio de Áreas Protegidas y al Viceministerio de Costeros y Marinos del Ministerio de Medio Ambiente como evidencia del ilícito.
Las redes y los manatíes
Los manatíes son mamíferos marinos en la Lista Roja de especies en peligro de extinción y una de las principales causas de muerte en la República Dominicana es por ahogamiento en redes de pesca. En los últimos años se han reportado muertes en Samaná, San Cristóbal, Montecristi y otras provincias por esta causa.
Otras causas son los golpes de embarcaciones y la pesca directa, aunque esta última ha disminuído en los últimos años.
Recientemente, se reportó la muerte de una pequeña cría de manatí en Montecristi, la cual se ha atribuido, de forma no oficial, al ahogamiento en una red de pesca de haitianos. Sin embargo, un informe del Acuario Nacional, que analizó los restos del animal, no determina la causa de la muerte por el estado avanzado de descomposición. Otra versión señala que pudo haber sido por un golpe de una embarcación.
En 2020 personal del Viceministerio de Recursos Costeros Marinos intervino por sorpresa la playa Palenque, en San Cristóbal, con la finalidad de incautar redes de pesca que consideran que atentan contra la vida y el ecosistema marino.
Luego de varias evaluaciones del impacto de las redes en esa zona, el Ministerio explicó a Diario Libre que en los ecosistemas presentes se había reportado la muerte de un manatí y tortugas marinas que quedaron atrapados en chinchorros y trasmallos de ahorque. Además de la captura de peces en estado juvenil.
En abril de este año se denunció y decomisó un trasmallo en la boca del Yaque del Norte en Montecristi, lugar que frecuentan manatíes para beber agua dulce, representando un serio peligro para los manatíes de la zona.
En 2021, se reportó la muerte de otro manatí por red de pesca en la playa Arroyo Higüero, Samaná.
En cuanto a las redes fuera de las áreas protegidas, la Ley 307-04, que crea el Consejo Dominicano de Pesca y Acuicultura (Codopesca), prohíbe el uso de chinchorros de arrastre y de redes de arrastre en las desembocaduras de cursos de agua, en los estuarios, en las bahías, praderas marinas y en las zonas arrecifales.
La respuesta del Ministerio
El viceministro de Áreas Protegidas, Carlos (Cau) Batista, sobre el caso de Estero Hondo y la problemática de las redes en zonas prohibidas, dijo a Diario Libre que la nueva gestión de este ministerio está haciendo un levantamiento de las necesidades de recursos y equipos en las áreas protegidas.
«En este momento estamos en un proceso de levantar información de los activos, y en el caso de Estero Hondo, además del centro de vigilancia, deben ser botes, armas y otros equipos a los guardaparques», indicó.
«También estamos en el proceso investigativo para dar con los responsables y someterlos a la justicia. Además, colocar la debida señalización, para que nadie alegue ignorancia de que es una zona de no pesca. Y, por último, el fortalecimiento del sistema de protección y vigilancia, para tener guardaparques las 24 horas del día».
Melvin del Cid, Diario Libre
Descubre más desde Notiultimas
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.