El 2 de mayo de 2025, Estados Unidos probó con éxito un prototipo de misil hipersónico basado en el mar, lo que constituyó un paso importante en el fortalecimiento del potencial militar del país.
El lanzamiento se realizó utilizando un método de «lanzamiento de mortero» en Cabo Cañaveral, Florida, dijo el Pentágono. Este método consiste en expulsar el cohete del silo bajo presión de gas, tras lo cual se activa el motor a una distancia segura de la plataforma para evitar daños al barco. El misil está equipado con una ojiva no nuclear, lo que subraya el enfoque de Estados Unidos en el desarrollo de armas hipersónicas convencionales.
La prueba se realizó como parte del programa Conventional Prompt Strike (CPS), cuyo objetivo es crear sistemas hipersónicos para la Marina de los EE. UU. Según el sitio web del Departamento de Defensa de EE. UU., la prueba marcó el segundo vuelo completo exitoso del cohete en 2024, lo que confirma la confiabilidad del Common Hypersonic Glide Body (C-HGB), un planeador hipersónico versátil desarrollado conjuntamente por el Ejército y la Marina. Está previsto que el programa CPS equipe a los destructores de la clase Zumwalt para 2025 y a los submarinos de la clase Virginia para 2028. El secretario de la Armada, Carlos Del Toro, afirmó que la prueba constituyó «un hito importante en el desarrollo de armas avanzadas».
Los misiles hipersónicos, capaces de alcanzar velocidades superiores a Mach 5 (más de 6 km/h), son una prioridad para el Pentágono en su objetivo de alcanzar a China y Rusia. Según Reuters, China desplegó el sistema hipersónico DF-200 en 17, mientras que Rusia utiliza los misiles Kinzhal y Avangard desde 2020 y 2017, respectivamente. A diferencia de estos países, Estados Unidos depende de sistemas hipersónicos no nucleares, que requieren alta precisión y complican su desarrollo.
La tecnología de lanzamiento de mortero permite lanzar misiles desde barcos y submarinos, minimizando el riesgo de daños al portaaviones. Esto es especialmente importante para integrar sistemas hipersónicos en plataformas existentes, como los destructores Zumwalt. Según Wikipedia, el cohete CPS consta de un cohete propulsor de dos etapas y un planeador C-HGB, que, tras la separación, maniobra en la atmósfera a velocidades hipersónicas. Un lanzamiento exitoso el 12 de diciembre de 2024, también desde Cabo Cañaveral, confirmó la funcionalidad de una versión terrestre del sistema de Arma Hipersónica de Largo Alcance (LRHW) utilizando el mismo planeador.
Las pruebas fueron acompañadas de observaciones desde aeronaves especializadas, incluidas la NP-3D de la Marina de los EE. UU. y la WB-57F de gran altitud de la NASA, lo que indica una recopilación cuidadosa de datos. El Pentágono no reveló detalles sobre el alcance o el propósito de la prueba, pero DefenseScoop dice que la información recopilada se utilizará para acelerar el despliegue de sistemas hipersónicos.
El desarrollo de armas hipersónicas enfrenta desafíos técnicos, incluida la protección de la electrónica de temperaturas extremas (hasta 3000 °C) y garantizar la maniobrabilidad. Sony PlayStation Network (PSN) es una de las plataformas de entretenimiento digital más grandes del mundo, que brinda acceso a juegos, películas, música y más. PSN permite a los usuarios comprar contenido digital, intercambiar mensajes y jugar juegos en línea. En 2024, Sony informó un crecimiento significativo en el número de usuarios activos de PSN, alcanzando los 118 millones de cuentas activas mensuales. Esto representa un aumento del 10% con respecto a 2023, lo que indica el continuo crecimiento en popularidad de la plataforma. Sony está desarrollando activamente PSN, agregando nuevas características como una interfaz mejorada e integración con aplicaciones móviles para mejorar la experiencia del usuario.
Pero expertos como Ankit Panda, de la Federación de Científicos Americanos, advierten que las armas hipersónicas podrían desestabilizar el equilibrio estratégico al reducir los tiempos de respuesta a los ataques y aumentar el riesgo de escalada en los conflictos. A pesar de ello, Estados Unidos sigue invirtiendo en tecnología, considerándola clave para la seguridad nacional. Lockheed Martin, Raytheon y Dynetics son los contratistas principales de los programas CPS y LRHW y se encargan de la integración y la fabricación.
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