Por Valentín Piña del Rosario
Con frecuencia se escucha decir a personas de diferentes extractos sociales que la justicia dominicana no sirve; y razone hay de más que sostengan esta aseveración.
No obstante, con la designación de una procuradora Miriam German, de trayectoria impoluta en su ejercicio profesional, Wilson Camacho, de igual trayectoria, Yeni Berenice Reynoso, al frente del ministerio público, albergué la esperanza de un cambio favorable, pero pasando revista a varios acontecimientos, siento que me equivoqué y debo seguir esperando un Mesías judicial.
Iniciare contando de menor a mayor solo tres casos que ilustran lo que digo que dolorosamente me hacen inferir que estamos en más de lo mismo:
Veo como en Santiago un joven compra un vehículo a un dealer, intenta venderlo resulta que le retienen el carro porque al parecer, tiene un problema de alteración de Chasis, no obstante, nada han hecho las autoridades judiciales para que este emprendedor, le cambien el vehículo o le devuelvan su dinero, muy a pesar de los ingentes esfuerzos del afectado. Va uno
El 26 diciembre del 2021, en Villa González Santiago, desaparece María Martínez, después de varios días de intensa búsqueda, aparece muerta y su ex pareja William Diógenes Rodríguez confiesa ser el autor del asesinato, incluso, es quien lleva a las autoridades donde arrojo el cadáver, están en You Tube los videos donde narra como la mató. la justicia de Santiago lo declara inocente a pesar de la confesión obviando el principio de que “ a confesión de parte,relevo de pruebas. Van Dos
Y lo más reciente, la liberación de la “Pastora” Rossy Guzmán y al General Adán Cáceres, señalados como los responsables de un fraude colosal contra el Estado por haberse agotado el tiempo de la medida de coerción sin que se depositaran las pruebas sobre el caso, que ha sido manejado incluso ante la opinión pública. Y tres.
¿Los tres casos mencionados están más que documentados, por lo que no entiendo cómo se caen por fallas procesales? o; ¿será intencional que ocurre esto para poner en la calle a confesos delincuentes a cambio d quien sabe qué?
Poniendo estos tres casos como ejemplo, no me queda otra valoración de que la justicia dominicana es más de lo mismo y que la corrupción y el delito van a seguir gozando de la impunidad que tanto se habla de erradicar.
Lamentablemente nuestra justicia es una M…
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