Villar, de 31 años, fue detenido el 12 de noviembre de 2011 y dos semanas después fue sentenciado por los delitos de desacato, resistencia y atentado, dijo a La Jornada el activista Elizardo Sánchez.
El preso se lanzó a la protesta extrema exigiendo su liberación, porque consideraba, igual que nosotros, que la condena era excesiva, agregó Sánchez. Villar fue internado en Aguadores, una prisión en un suburbio de Santiago, y al declararse en huelga de hambre lo llevaron a una celda de castigo, donde contrajo una pulmonía.
Sin embargo, su traslado al hospital clínico-quirúrgico de la ciudad fue demorado y ocurrió ya en enero, dijo Sánchez. Estaba bajo custodia del Estado y era una muerte evitable.
Según Sánchez, Villar sostuvo la huelga unos 50 días y se había unido en agosto o septiembre del año pasado a un grupo opositor llamado Unión Patriótica de Cuba, que encabeza José Daniel Ferrer, uno de los 75 activistas detenidos en 2003 y excarcelados este año.
Villar residía en Contramaestre, en la provincia de Santiago de Cuba. Su viuda, Maritza Pelegrino, también se había incorporado a un movimiento opositor, dijo Sánchez. La pareja tuvo dos hijas.
Esta noche no había una versión oficial sobre el caso, pero el blog de Yohandry, que refleja posiciones gubernamentales, dijo que Villar murió de fallo multiorgánico por sepsis generalizada.
Hace dos años falleció en un hospital de La Habana el activista Orlando Zapata, al cabo de una huelga de hambre en prisión de más de dos meses.
(Fuente: Gerardo Arreola, Corresponsal, Periódico La Jornada)