El alto el fuego trae esperanza a Gaza; la Cruz Roja recupera a los primeros rehenes de Hamás

GAZA/EL CAIRO/JERUSALÉN (Reuters) – Los palestinos salieron a las calles para celebrar y regresaron a los escombros de sus casas bombardeadas el domingo, mientras la Cruz Roja iba a recuperar a los primeros rehenes liberados en virtud de un acuerdo de alto el fuego que detuvo los combates en la Franja de Gaza.

La tregua finalmente entró en vigor después de un retraso de tres horas, durante el cual las fuerzas israelíes atacaron Gaza desde el aire en un bombardeo final, matando a 13 personas, según las autoridades sanitarias palestinas.

equipo del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) estaba en camino para recoger de Hamas a los primeros rehenes liberados en virtud del acuerdo de alto el fuego, dijo a Reuters un funcionario involucrado en la operación.

Los militantes identificaron a tres mujeres como los primeros rehenes que liberarían el domingo en virtud del acuerdo, que exige que 33 de los 98 rehenes israelíes y extranjeros retenidos en Gaza sean liberados en una primera fase de seis semanas, a cambio de miles de prisioneros palestinos retenidos en cárceles israelíes.

Cuando cesaron los disparos, los palestinos salieron a las calles, algunos para celebrar, otros para visitar las tumbas de sus familiares.

«Siento que por fin encontré algo de agua para beber después de perderme en el desierto durante 15 meses. Me siento viva de nuevo», dijo a Reuters Aya, una mujer desplazada de la ciudad de Gaza que ha estado refugiada en Deir Al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, durante más de un año, a través de una aplicación de chat.

En el norte del territorio, donde tuvieron lugar algunos de los ataques aéreos israelíes y las batallas con los militantes más intensos, la gente se abrió paso por carreteras estrechas a través de un paisaje devastado de escombros y metal retorcido.

Combatientes armados de Hamas recorrieron la ciudad sureña de Khan Younis mientras la multitud vitoreaba y cantaba. Policías de Hamas, vestidos con uniformes de policía azules, se desplegaron en algunas zonas después de meses de intentar mantenerse fuera de la vista para evitar los ataques israelíes.

La gente que se había reunido para vitorear a los combatientes cantaba «Saludos a las Brigadas Al-Qassam», el brazo armado de Hamas.

«Todas las facciones de la resistencia se quedan a pesar de (el primer ministro israelí, Benjamin) Netanyahu», dijo un combatiente a Reuters. «Este es un alto el fuego, uno completo y exhaustivo si Dios quiere, y no habrá un retorno a la guerra a pesar de él».

Las calles de la destrozada Ciudad de Gaza, en el norte del territorio, ya estaban llenas de grupos de personas que ondeaban la bandera palestina y filmaban las escenas con sus teléfonos móviles. Varios carros cargados con pertenencias domésticas circulaban por una calle llena de escombros.

Ahmed Abu Ayham, un residente de Ciudad de Gaza de 40 años que se refugia con su familia en Khan Younis, dijo que la escena de destrucción en su ciudad natal era «terrible», y agregó que si bien el alto el fuego puede haber salvado vidas, no era momento para celebraciones.

«Estamos sufriendo, un dolor profundo y es hora de que nos abracemos unos a otros y lloremos».

Largas filas de camiones que transportaban combustible y suministros de ayuda formaban cola en los cruces fronterizos en las horas previas a la entrada en vigor del alto el fuego. El Programa Mundial de Alimentos dijo que comenzaron a cruzar el domingo por la mañana.

El acuerdo requiere que se permita la entrada de 600 camiones de ayuda a Gaza cada día del cese del fuego inicial de seis semanas, incluidos 50 que transportan combustible. La mitad de los 600 camiones de ayuda se entregarían en el norte de Gaza, donde los expertos han advertido que la hambruna es inminente.

La guerra entre Israel y Hamás comenzó después de que los militantes atacaran ciudades y pueblos israelíes el 7 de octubre de 2023, matando a 1.200 personas y capturando a más de 250 rehenes, según los recuentos israelíes.

Más de 47.000 palestinos han muerto desde entonces en ataques israelíes que redujeron la Franja de Gaza a un páramo, según funcionarios médicos del enclave. Casi todos los 2,3 millones de habitantes del enclave se han quedado sin hogar. Alrededor de 400 soldados israelíes también han muerto.

El acuerdo de alto el fuego se produce tras meses de negociaciones intermitentes mediadas por Egipto, Qatar y Estados Unidos, y entra en vigor en vísperas de la investidura del presidente electo estadounidense Donald Trump, que presionó tanto a Hamás como a Israel para que detuvieran los combates antes de que asuma el cargo.

Hamás identificó a los primeros tres rehenes israelíes que serían liberados el domingo a cambio de 90 palestinos como Romi Gonen, Doron Steinbrecher y Emily Damari. Israel no confirmó de inmediato los nombres.


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