BBCMundo
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, abandonó Reino Unido después de que el Tribunal Superior de Londres le concediera la libertad bajo fianza, tras llegar a un acuerdo con Estados Unidos que le permitirá declararse culpable de un cargo del que se le acusa y quedar libre.
Assange fue acusado de conspiración para obtener y divulgar información relevante a la defensa nacional estadounidense, después de que el sitio Wikileaks publicara documentos militares secretos de Estados Unidos.
Pasó los últimos cinco años en una cárcel británica, mientras luchaba contra su extradición a Estados Unidos, donde temía pagar una larga condena de prisión.
Como parte del acuerdo, Assange no pasará tiempo bajo custodia estadounidense y recibirá crédito por el tiempo que pasó encarcelado en el Reino Unido.
El avión de Assange aterrizó en Bangkok el martes para reabastecerse antes de volar a la isla de Saipán en las Islas Marianas del Norte, un territorio estadounidense en el Pacífico Sur.
Allí se realizará una audiencia judicial en un tribunal de distrito de EE.UU., donde se espera que Assange se declare culpable y luego quede libre para regresar a Australia, según el acuerdo.
Cuáles son los términos del acuerdo
Julian Assange llegó a un acuerdo con las autoridades estadounidenses que le permitirá declararse culpable de violar la Ley de Espionaje.
Los fiscales estadounidenses originalmente querían juzgar a Assange por 18 cargos, en su mayoría bajo la Ley de Espionaje, por la publicación de documentos militares confidenciales de Estados Unidos relacionados con las guerras en Irak y Afganistán.
En un comunicado que detallaba los 18 cargos, en 2019, Washington acusó al fundador de Wikileaks de conspirar para acceder ilegalmente a las bases de datos militares estadounidenses para adquirir información sensible.
Assange siempre negó los cargos, diciendo que las filtraciones fueron un acto de periodismo.
No obstante, este miércoles, Assange sólo responderá a una acusación. Según informó la emisora asociada de la BBC en Estados Unidos, CBS News, los fiscales del Departamento de Justicia han recomendado una sentencia de 62 meses de prisión tras la declaración de culpabilidad.
Pero Assange no pasará ningún tiempo en una prisión estadounidense porque, según el acuerdo, se le acreditarán los aproximadamente los cinco años que pasó encarcelado en el Reino Unido.
Si hubiera sido declarado culpable de los 18 delitos originales, los abogados de Assange señalaron que su cliente podría haber enfrentado hasta 175 años de cárcel, aunque el gobierno de Estados Unidos había sostendio que una sentencia de cuatro a seis años era más probable.
Por qué las Islas Marianas
En una carta emitida por el Departamento de Justicia de EE.UU. se deja entreveer que Assange no confía en ir a Estados Unidos para presentarse a declarar su culpabilidad, según el acuerdo. Indica este documento que está reacio a regresar voluntariamente a Estados Unidos continental.
El fundador de Wikilieaks tiene una profunda desconfianza del gobierno estadounidense, hasta el punto de que ha acusado a sus funcionarios de supuestamente planear su asesinato.
Además, logísticamente realizar la audiencia en las islas tiene sentido porque se encuentran relativamente cerca de Australia, a unos 3.200 kilómetros de distancia.
El Departamento de Justicia asegura que Assange regresará a su país de origen poco después de que emita su declaración.
Cómo se llegó al acuerdo
En las primeras horas de la mañana del martes en Reino Unido, Wikileaks publicó una declaración en X.
El comunicado dice que la liberación de Assange es «el resultado de una campaña global» que «creó el espacio para un largo período de negociaciones con el Departamento de Justicia de Estados Unidos».
Continúa afirmando que «WikiLeaks publicó historias reveladoras de corrupción gubernamental y abusos contra los derechos humanos, responsabilizando a los poderosos por sus acciones. Como redactor jefe, Julian pagó severamente por estos principios y por el derecho de la gente a saber».
La plataforma está dirigida actualmente por el periodista islandés Kristinn Hrafnsson.
Hrafnsson reiteró que el acuerdo de culpabilidad de Assange es «el resultado de un largo, largo proceso», y que se darán a conocer más detalles en las próximas 24 horas.
«Ha sido una batalla dura», dijo Hrafnsson, y subrayó que la atención se centra ahora en que Assange se reúna con su familia.
Añadió que la campaña para liberar a Assange cobró impulso en las últimas dos semanas, después de la creciente participación del primer ministro australiano, Anthony Albanese, y una decisión de la Corte Suprema en Londres, que permitió a Assange apelar contra su extradición a Estados Unidos.
El comentarista legal de la BBC Joshua Rozenberg explicó que este tipo de acuerdos son comunes y que no es inusual que las autoridades de Estados Unidos acepten una declaración de culpabilidad de un delito a cambio de concederle al acusado su libertad.
Stella Assange, esposa del fundador de Wikileaks, afirmó a la agencia de noticias Reuters que buscarán un indulto después de la esperada declaración de culpabilidad de su esposo.
Expresó que el esperado enjuiciamiento de su esposo en virtud de la Ley de Espionaje era una «preocupación muy seria» para los periodistas de todo el mundo.
Cualquier indulto futuro debería ser concedido por el presidente de Estados Unidos.
Reacciones
Los simpatizantes de Assange en todo el mundo han comenzado a celebrar la noticia de su posible liberación, pero sus allegados han señalado con cautela que no es un acuerdo cerrado hasta que el juez de las Islas Marianas del Norte lo firme mañana.
En su declaración anterior, WikiLeaks describió el acuerdo como «aún no finalizado formalmente».
Stella Assange resaltó que ha sido difícil para su familia «planificar o incluso imaginar las próximas horas y días» dada la rapidez con la que se están moviendo las cosas.
Pero la presentación formal de su caso indica que Assange debería ser un hombre libre pronto, salvo complicaciones legales de última hora.
Sin embargo, no todos comparten la misma alegría con su pronta liberación.
El exvicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, criticó enérgicamente el acuerdo, calificándolo de «error judicial», y añadió que debió haber «sido procesado con todo el peso de la ley».
En una publicación en X dijo: «No debería haber acuerdos de culpabilidad para evitar la prisión para cualquiera que ponga en peligro la … seguridad nacional de los Estados Unidos. Nunca».