Las obsoletas plantas a carbón de Punta Catalina son el talón de Aquiles del presidente Medina

El candidato presidencial y presidente del PDI, Dr. Ismael Reyes Cruz, dijo que el caso ODEBRECH se ha convertido en el talón de Aquiles del presidente Danilo Medina, porque en el país ya todo el mundo sabe que las plantas a carbón -plantas obsoletas- que se están instalando en Punta Catalina, nos están costando dos veces su precio real en el mercado internacional, el cual es de 900 mil  millones de dólares.

Argumentó que pasando por alto esta realidad, el gobierno de Danilo Medina las contrató y así se las aprobó su Congreso Nacional, por US$2,140,000,000 millones de dólares; o sea, con una sobrevaloración de 1,140 millones de dólares; que equivalen al cambio de hoy a casi  55,000,000 (cincuenta y cinco mil) millones de pesos de más que los tendrá que pagar el pueblo trabajador, que es quien entrega dinero al gobierno mediante el pago de tasas y elevados impuestos.

Ismael señaló que frente a tal situación nos llega a la memoria lo que escribió  la afamada escritora Ayn Rand, cuyo nombre de nacimiento era Alisa Zinovievna Rosenbaum, una filosofa, novelista y ensayista de origen judío-ruso, nacida en San Petersburgo, -Imperio Ruso-,  el día 2 de febrero del año 1905,  y que falleció  en la ciudad de New York el día 6 de marzo del año 1982, quien escribió lo siguiente:

«Cuando adviertas que para producir necesitas la autorización de quienes no producen nada; cuando compruebes que el dinero fluye a quienes no trafican con bienes, solo con favores; cuando percibas que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por su trabajo, y que las leyes no te protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra ti; cuando descubras que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un auto-sacrificio, entonces podrás afirmar, sin temor a equivocarte, que tu sociedad está condenada».

Ismael Reyes reiteró que es necesario continuar la lucha frente a los corruptos y que hay que llevar esa lucha hasta sus últimas consecuencias, para evitar que la nación sea condenada al colapso.

Expresó que el pueblo en las calles debe de seguir fortaleciendo su lucha en contra de gente sin ética, sin moral y sin  principios, que quieren continuar saqueando el patrimonio nacional y perpetuar en la nación  un régimen de corrupción, complicidad y saqueo, lacras éstas que mantienen al país sumido en la inseguridad ciudadana, el crimen organizado y en la pobreza. Finalizó diciendo que hay que decirles: ¡No a los corruptos! ¡No a la impunidad! ¡No a los que quieren seguir robándole al pueblo!

 

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