WASHINGTON, 1 oct (Reuters) – El principal republicano de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy, podría afrontar el fin prematuro de su papel como presidente después de que un crítico de línea dura dentro de su propio partido pidiera el domingo una votación para destituirlo tras la aprobación de un proyecto de ley de financiación provisional que obtuvo más apoyo de los demócratas que de los republicanos.
La Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, votó 335 a 91 a favor de adoptar una medida provisional de 45 días, horas antes de que expirara el financiamiento para las agencias federales. Posteriormente, el Senado liderado por los demócratas aprobó el mismo proyecto de ley con apoyo bipartidista y se lo envió al presidente Joe Biden para que lo promulgara.
El representante republicano de línea dura Matt Gaetz dijo a CNN el domingo que presentaría una «moción para anular», un llamado a una votación para destituir a McCarthy como presidente.
«Si a esta hora la próxima semana Kevin McCarthy sigue siendo presidente de la Cámara, será porque los demócratas lo rescataron», dijo Gaetz en una entrevista en ABC. «Soy implacable y seguiré persiguiendo este objetivo».
McCarthy soportó 15 rondas de votación brutales en enero antes de ser elegido presidente, durante las cuales acordó múltiples concesiones que aumentaron el poder de los republicanos de línea dura.
Una fue la decisión de permitir que sólo un miembro presentara una moción de anulación, lo que significaba que los partidarios de la línea dura podían amenazar la presidencia de McCarthy en cualquier momento.
Poco después de que la Cámara aprobara un proyecto de ley el sábado por la noche para evitar un cierre parcial del gobierno, los conservadores republicanos de línea dura comenzaron a atacar el papel de McCarthy como presidente, diciendo que había logrado una victoria para el «unipartido» de Washington.
«¿Debería seguir siendo presidente de la Cámara?» Preguntó el representante republicano Andy Biggs, un líder de línea dura, en la plataforma social X, antes conocida como Twitter.
‘ANÍMATE E INTENTALO’
McCarthy decidió votar sobre una medida que podría ganar el apoyo demócrata, sabiendo muy bien que podría poner en peligro su trabajo. Uno de sus asesores dijo a Reuters que el presidente creía que algunos partidarios de la línea dura intentarían derrocarlo bajo cualquier circunstancia.
«Adelante, inténtalo», dijo McCarthy en comentarios dirigidos a sus oponentes el sábado. «¿Sabes qué? Si tengo que arriesgar mi trabajo por defender al público estadounidense, lo haré».
La medida bipartidista tuvo éxito un día después de que Biggs y otros 20 partidarios de la línea dura bloquearon un proyecto de ley provisional republicano que contenía fuertes recortes de gastos y restricciones a la inmigración y las fronteras, todo lo cual favorece a los partidarios de la línea dura.
El fracaso del proyecto de ley acabó con las esperanzas republicanas de impulsar una medida conservadora y abrió la puerta a la medida bipartidista que fue respaldada por 209 demócratas de la Cámara y 126 republicanos. Noventa republicanos se opusieron a la medida provisional.
Los partidarios de la línea dura se quejaron de que la medida, conocida como resolución continua o CR, mantenía políticas favorecidas por los demócratas, incluidos Biden, el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, y la ex presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
«Kevin McCarthy puso en el pleno un CR que obtuvo 209 votos demócratas, ya que mantuvo las políticas de Biden-Pelosi-Schumer que están destruyendo el país y los niveles de gasto que nos están llevando a la bancarrota», dijo el representante de línea dura Bob Good en X.
LA RESPUESTA DEMOCRATA NO ESTÁ CLARA
No estaba claro qué acción podrían tomar los demócratas si un republicano intentara dejar vacante la presidencia y la Cámara votara sobre la medida.
El representante republicano Brian Fitzpatrick, que copreside el grupo bipartidista de solucionadores de problemas, dijo que el bipartidismo en sí sería el verdadero tema en cualquier votación sobre el futuro de McCarthy.
«La moción de anulación llegará… y la pregunta será: ¿vamos a castigar o recompensar a los líderes que presenten soluciones bipartidistas? Ésa es claramente la pregunta», dijo Fitzpatrick a los periodistas.
Algunos demócratas han sugerido que podrían apoyar a McCarthy si se produjera un intento de derrocamiento en un momento turbulento. Otros han sugerido que podrían respaldar a un republicano moderado dispuesto a compartir el mazo con ellos y permitir que se comparta el poder dentro de los comités de la Cámara. Otros no han mostrado interés en ayudar a ningún candidato a presidente aparte del líder demócrata de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries.
«Ese es su problema», dijo el representante demócrata Jim McGovern sobre McCarthy. «Voto por Hakeem Jeffries como presidente».
«La gente me ha preguntado acerca de hacer un trato con ellos. Pero no soy una cita barata. Soy una cita cara».
La moción se utilizó por primera vez en 1910, cuando el entonces presidente republicano Joseph Cannon la presentó él mismo para obligar a los detractores de su propio partido a tomar una decisión sobre si lo apoyaban o no, según los Archivos de la Cámara. La moción fracasó.
El entonces presidente republicano Newt Gingrich fue amenazado con una moción de anulación en 1997. Aunque logró aplastar la resistencia y evitar que se presentara una resolución real, renunció en 1998 después de resultados decepcionantes en las elecciones de mitad de período de ese año.
El entonces representante republicano Mark Meadows presentó en 2015 una moción de anulación contra el presidente republicano John Boehner. No se llegó a votación, pero Boehner renunció de todos modos unos meses después, citando los desafíos de gestionar una creciente facción conservadora de línea dura de su partido.
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