La pasividad mundial tendrá consecuencias devastadoras, alerta // Envía carta a todos los países de América Latina y a los estados integrantes de la ONU // Las agresiones trascienden a Venezuela y amenazan la estabilidad regional, indica el presidente
Caracas. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, envió una carta a todos los jefes de Estado y de gobierno de América Latina y el Caribe, así como a los países que integran el sistema de la Organización de Naciones Unidas (ONU), para advertir sobre “una escalada de agresiones de extrema gravedad por parte del gobierno de Estados Unidos”.
Maduro resaltó que los efectos de las acciones de Washington trascienden a Venezuela, amenazan con desestabilizar a toda la región y al sistema internacional en su conjunto.
Desde Caracas, el mandatario hizo un llamado a los gobiernos del mundo a condenar explícitamente las acciones de agresión, piratería y ejecuciones extrajudiciales cometidas por Estados Unidos, así como a exigir el cese inmediato del despliegue militar, el bloqueo y los ataques armados en el Caribe.
Además, pidió activar los mecanismos del sistema multilateral para investigar, sancionar y prevenir la repetición de tales hechos.
Uso prohibido de la fuerza
En la misiva, el líder bolivariano enfatizó que la operación Lanza del Sur, activada por el Departamento de Defensa de Estados Unidos, constituye una amenaza directa del uso de la fuerza, prohibida por el artículo 2, numeral 4, de la Carta de Naciones Unidas. Asimismo, vulnera la declaración de América Latina y el Caribe como zona de paz, firmada por todos los países de la Celac en 2014, y el Tratado de Tlatelolco, que determina a la región como libre de armas nucleares.
“Venezuela no ha cometido acto alguno que justifique esta intimidación militar”, afirmó el mandatario en el texto, que contabilizó 28 ataques armados perpetrados por fuerzas estadunidenses en el Caribe y el Pacífico oriental contra embarcaciones civiles. El saldo es de 104 personas ejecutadas extrajudicialmente, “muchas de ellas en condición de naufragio”, denunció Maduro en el documento leído este lunes por el canciller venezolano, Yván Gil.
Venezuela acusó que estos hechos violan el derecho a la vida, artículo 3 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y artículo 6 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, así como los Convenios de Ginebra de 1949, que obligan a proteger a civiles, heridos y náufragos en el mar; y el Protocolo Adicional Primero de 1977, que impone la distinción absoluta entre población civil y combatiente.
Esto, señaló el presidente venezolano, demuestra una práctica sistemática de uso letal de la fuerza fuera de todo marco legal internacional e incluso de la propia Constitución de Estados Unidos.
Secuestro y robo
Maduro también denunció ante las naciones del mundo que Estados Unidos cometió el secuestro y robo en alta mar de dos buques con petróleo venezolano, aproximadamente 4 millones de barriles, además de decretar un bloqueo contra las exportaciones venezolanas del energético. Caracas aseveró que estas acciones constituyen, de acuerdo al derecho internacional, actos de piratería.
“Que estas acciones sean ejecutadas por las fuerzas armadas de un Estado los hace aún más graves, pues constituye adicionalmente actos de agresión conforme a la resolución 3314 de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas, violaciones a la Convención de Alta Mar de 1958, ratificada por Washington, que reconoce la jurisdicción exclusiva del Estado pabellón, ataques directos contra la seguridad de la navegación marítima y el comercio internacional prohibidos por la Convención para la Represión de Actos Ilícitos contra la Seguridad de la Navegación Marítima ”, indicó el presidente en la nota.
Tragedia histórica
Maduro en su escrito apeló a la historia para alertar que la inacción de la comunidad internacional ante la agresión y el desprecio por el derecho internacional tiene consecuencias devastadoras. Señaló que “el silencio y la pasividad internacional frente al ascenso del nazismo condujeron a una tragedia humana sin precedente: el Holocausto y una guerra mundial”.
Hoy la lógica es la misma, enfatizó, “si se tolera el uso unilateral de la fuerza, la ejecución de civiles, la piratería y el saqueo de recursos de estados soberanos, el mundo se encamina hacia un escenario de confrontación global de proporciones imprevisibles”.
Venezuela reafirmó su vocación de paz, al tiempo que declaró que está preparada para defender su soberanía, su integridad territorial y sus recursos conforme al derecho internacional.
Caracas advirtió que estas agresiones no impactarán sólo al país sudamericano, ya que el bloqueo y la piratería contra el comercio energético venezolano afectarán el suministro global de petróleo, incrementarán la inestabilidad de los mercados internacionales y golpearán las economías de América Latina y el Caribe y el mundo, especialmente en los países más vulnerables.
“Defender hoy a Venezuela es defender la paz, la legalidad internacional y del mundo”, finalizó la carta de Maduro, fechada el lunes 22 de diciembre.
El mandatario consideró que a su par Donald Trump “le iría mejor con el mundo si él atendiera los temas de su país. No puede ser que él atienda 70 por ciento de sus discursos y declaraciones y el tiempo es (sobre) Venezuela, ¿y Estados Unidos?”
En un acto transmitido en la televisión estatal venezolana, el presidente Maduro añadió que “el mandatario Trump lo podría hacer mejor en su país y en el mundo” y recordó la llamada telefónica “cordial” que mantuvo con el magnate el pasado 21 de noviembre.
Rusia ofrece cooperación
Más temprano, el canciller Yván Gil informó que durante una llamada telefónica con su homólogo ruso, Serguei Lavrov, éste afirmó que el Kremlin brindará cooperación y apoyo a Venezuela en contra del bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos al país caribeño.
“He conversado telefónicamente con el canciller de Rusia, Serguei Lavrov, reafirmando la relación de hermandad, respeto y cooperación estratégica que nos une”, escribió Gil en redes sociales.
También indicó que en la conversación repasaron las agresiones y violaciones flagrantes al derecho internacional que se han cometido en el Caribe: ataques contra embarcaciones y ejecuciones extrajudiciales y los actos ilícitos de piratería perpetrados por el gobierno de Estados Unidos.
Lavrov expresó la solidaridad de Rusia con el pueblo de Venezuela y con el presidente Maduro; ratificó su pleno respaldo frente a las hostilidades provenientes de Washington, al señalar que “este tipo de agresiones no pueden ser toleradas”.
Asimismo, Rusia respalda las acciones emprendidas por Venezuela en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU, como la semana pasada ya lo manifestó el gobierno de China.
(Ángel González, La jornada)
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