El presidente sirio, Bashar al-Asad, acusa a EE.UU. de robar los recursos de su país, además de asociar con los terroristas para compartir ganancias en el noreste.
En una entrevista con la cadena China Central Television (CCTV), que se transmitió este viernes, presidente sirio, Bashar al-Asad, denunció la cooperación de Estados Unidos con presuntos terroristas en la región nororiental de su país.
La región del noreste de Siria “está ocupada por terroristas y estadounidenses. Así que el problema no es sólo el robo, sino más bien una asociación para compartir las ganancias. Un segundo problema para una superpotencia es asociarse con terroristas”, dijo.
En este contexto, lamentó que Siria perdió no solo petróleo de estas zonas, sino también el trigo, por lo que, según afirmó, el país árabe que exportaba trigo, ahora cuenta con sólo un poco de trigo y una electricidad inferior al nivel mínimo de vida.
En otro momento, comentó sobre la reconstrucción del país, asegurando que, si se detiene la guerra y se lleva a cabo el proceso de reconstrucción, el país sea mucho mejor de lo que era antes de la guerra. “No hablo desde esperanzas o expectativas. Hablo basándome en la situación antes de la guerra. Antes de la guerra, el crecimiento de Siria estaba en su mejor momento, cerca del 7 %, lo que es un porcentaje muy alto para un país cuyas capacidades son limitadas”, afirmó.
Al hablar de su visita a China, Al-Asad destacó el gran papel que Pekín ha desempeñado durante los últimos diez años con el desarrollo económico, con iniciativas políticas y de desarrollo.
Asimismo, indicó que el gigante asiático es una “gran nación” que desempeña un papel crucial en el escenario mundial. Enfatizó que cuando China habla de asociación, lo hace con un nuevo principio en mente, desprovisto de hegemonía y añadió que los países pequeños necesitan este tipo de asociación.
El presidente sirio subrayó la importancia de esta asociación para Damasco en momentos que Occidente busca “matar de hambre al pueblo sirio” al imponer bloqueo económico al país árabe.
A pesar del rotundo rechazo del Gobierno de Damasco a la ilegal presencia de EE.UU. en Siria, Washington ha estado ampliando su contingente en el este y el noreste del país, bajo el pretexto de “proteger” las zonas petroleras de los grupos terroristas, pero, en realidad, lo que busca es extraer el crudo, el gas y los recursos naturales.
A ello se suma varias tandas de sanciones que el Gobierno de EE.UU. y otros países europeos han impuesto al país árabe, lo que ha profundizado el sufrimiento de los sirios.
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