Que mueran alrededor de 500 millones de abejas en un país como Brasil ha hecho saltar las alarmas de colectivos ecologistas y de personas en todo el mundo
El calentamiento global, la falta de sostenibilidad, el abuso de pesticidas en los alimentos y miles de actos irresponsables que llevamos a cabo…
Todos estos actos son los que estamos llevando a cabo contra nosotros mismos. Los que estamos provocando este ‘envenenamiento’ global desatado.
Llevamos años recogiendo, a través de hechos, signos de que estamos destruyendo el planeta, y que, además, se origina paralelamente a nuestra propia destrucción.
El último aviso nos lo han dado las abejas, necesarios contribuyentes a la reproducción de miles de plantas.
Las abejas son consideradas una de las especies de polinizadores más integrales de la naturaleza. Vital para la sostenibilidad natural.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), las abejas, encargadas de polinizar el 75% de los cultivos mundiales, están muriendo apresuradamente.
En tan sólo 3 meses, Brasil ha perdido más de 500 millones de abejas, poniendo en peligro el futuro de nuestra cadena alimenticia.
La muerte de estos insectos en todo el mundo es un claro aviso de que estamos siendo contaminados con pesticidas.
Los científicos culpan de esta ruinosa situación al alto aumento del uso de pesticidas; desde enero, Brasil ha aprobado casi 300 nuevos pesticidas para su uso en cultivos.
Pesticidas como el fipronil, que la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU clasifica como un posible carcinógeno humano.
Alberto Bastos, presidente de la Asociación de Apicultores del Distrito Federal de Brasil, afirma que la defunción de todas estas abejas es un signo claro de envenenamiento.
Por el momento, el gobierno brasileño no ha tomado ninguna medida al respecto. Y mientras tanto, la Amazonia sigue siendo devastado por las llamas.
Vía: Culturainquieta.com