El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo que los ataques a los gasoductos de gas natural Nord Stream que conectan Rusia con Alemania ofrecen una “enorme oportunidad” para acabar con la dependencia de Europa de la energía rusa.
“Es una gran oportunidad para eliminar de una vez por todas la dependencia de la energía rusa y así quitarle a Vladimir Putin la militarización de la energía como un medio para avanzar en sus diseños imperiales”,
“Eso es muy importante y ofrece una gran oportunidad estratégica para los próximos años”, agregó Blinken, dijo Blinken en una conferencia de prensa conjunta con la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Mélanie Joly.
Según @SecBlinken , el bombardeo del oleoducto Nord Stream “ofrece una gran oportunidad estratégica para los años venideros”. Lástima que esta tremenda oportunidad para los burócratas de DC vendrá a expensas de todos los demás, especialmente este próximo invierno. pic.twitter.com/T2eacQUuBF
Blinken hizo los comentarios cuando se le preguntó qué están haciendo EE. UU. y Canadá para aliviar la crisis energética de Europa tras el sabotaje del Nord Stream. Blinken dijo que Washington ha estado trabajando durante algún tiempo para proporcionar a Europa más energía y, como resultado, EE. UU. es ahora el mayor proveedor de gas natural licuado (GNL) de Europa.
“Y ahora somos el proveedor líder de GNL para Europa para ayudar a compensar cualquier gas o petróleo que se esté perdiendo como resultado de la agresión de Rusia contra Ucrania”, dijo Blinken.
A lo largo de los años, EE. UU. trabajó duro para oponerse a Nord Stream 2 mediante la imposición de sanciones, pero no logró detener su construcción. Berlín detuvo el proyecto el 22 de febrero después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenara tropas en el Donbas, una orden que precedió a la invasión del 24 de febrero.
Siempre existía la posibilidad de que Nord Stream 2 se pusiera en línea si las relaciones entre Europa y Rusia se descongelaban, pero ahora el daño podría ser irreparable. Rusia recientemente dejó de entregar gas a través de Nord Stream 1 como resultado de las sanciones occidentales.
En este punto, no está claro quién estuvo detrás de los ataques a Nord Stream, pero Estados Unidos ciertamente tiene un motivo. El viernes, Putin culpó a los «anglosajones» por el incidente , pareciendo señalar con el dedo a los EE. UU. y sus aliados.
“Las sanciones no son suficientes para los anglosajones. Se han volcado al sabotaje, es increíble, pero cierto, han organizado explosiones en los gasoductos internacionales del Nord Stream”, dijo el líder ruso durante una ceremonia por la anexión de cuatro territorios ucranianos.
Estados Unidos ha rechazado la afirmación de que estuvo detrás del ataque, y los medios occidentales insinúan que Rusia fue responsable a pesar de que los gasoductos son propiedad principalmente de Gazprom, la compañía estatal de gas de Rusia.
The Associated Press calificó la afirmación de que Estados Unidos estaba involucrado como una «teoría de conspiración sin fundamento» que estaba siendo impulsada por el Kremlin y los medios estatales rusos. Pero una de las acusaciones más significativas provino de Radek Sikorski, ex ministro de Relaciones Exteriores de Polonia y actual miembro del Parlamento Europeo. Sikorski agradeció a EE. UU. por el incidente en Twitter en un tuit eliminado desde entonces , que no se menciona en la historia de AP .
AP también omitió el contexto de que EE. UU. había estado tratando de evitar que se construyera Nord Stream 2 a través de sanciones y presiones sobre el gobierno alemán.
Si bien ni el Nord Stream 1 ni el Nord Stream 2 estaban entregando gas a Europa en el momento del sabotaje, ambos gasoductos tenían gas bajo presión. Las fugas que fueron causadas por explosiones dieron como resultado lo que podría equivaler a la mayor liberación de gas metano jamás vista . Las fugas se descubrieron el martes pasado y las autoridades danesas dijeron que el Nord Stream 2 finalmente dejó de tener fugas el sábado, mientras que el Nord Stream 1 se detuvo el domingo.
Publicado originalmente por AntiWar