Moscú, 29 ago (EFE).- Rusia rechazó hoy las declaraciones de secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, quien el viernes pasado advirtió en Canadá de que la mayor presencia militar rusa en el Ártico supone un «desafío estratégico» para la Alianza.
«Nuestra reacción (a la declaraciones de Stoltenberg) es negativa. El Ártico es zona de nuestra actividad económica, de actividades para garantizar la seguridad de Rusia. Es una esfera de nuestros intereses vitales», dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en rueda de prensa telefónica.
Junto con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, el secretario general de la OTAN recalcó que el trayecto más corto para que misiles y bombarderos rusos lleguen a Europa occidental es a través de la región ártica.
Además, Stoltenberg explicó que Rusia está utilizando el Ártico para realizar pruebas de nuevas armas como los misiles hipersónicos y que ha abierto «cientos de nuevas bases árticas así como antiguas instalaciones militares de la etapa soviética, incluidos bases aéreas y puertos de aguas profundas».
Este viernes Washington anunció la creación del cargo de embajador de Estados Unidos para el Ártico, región en la que también China aumenta su presencia.
Peskov recalcó que la cooperación de Rusia con otros países, y en particular con China, «apunta exclusivamente al ulterior desarrollo de la zona ártica y no representa ni puede representar amenaza alguna para ningún país o agrupación».
Agregó que el Kremlin considera que las declaraciones de Stoltenberg son una expresión del propósito de contrarrestar los intereses rusos en el Ártico, que Moscú defenderá con los medios necesarios.