Juan Orlando Hernández se ha convertido en el centro de una investigación abierta por la Corte del Distrito Sur de Nueva York, según un informe de la agencia Reuters.
Así, la agencia cita los documentos presentados ante el organismo judicial, en el que se afirma que el mandatario está siendo investigado junto con otros «funcionarios de alto rango» en relación al caso del presunto narcotraficante Geovanny Fuentes Ramírez.
De acuerdo con los fiscales estadounidenses, el presidente protegía a Fuentes Ramírez a cambio de sobornos. El mandatario «aceptó millones de dólares en ganancias del tráfico de drogas y, a cambio, prometió a los narcotraficantes protección».
Origen de las acusaciones
Estas acusaciones no son nuevas, en realidad se remontan a marzo de 2020, cuando un fiscal de Nueva York y un agente de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) señalaron a Hernández tras la detención de Fuentes Ramírez en el Aeropuerto Internacional de Miami.
Como diputado, Hernández se habría reunido con el presunto narcotraficante en 2013 y 2014. En estos encuentros, se acordaron sobornos para que el mandatario aceptase movilizar incluso a las Fuerzas Armadas de Honduras con la finalidad de proteger los negocios de drogas.
Además de él, su hermano y excongresista Juan Antonio Hernández fue declarado culpable de narcotráfico en EEUU en octubre de 2019. En su juicio, se mencionó que el presidente habría aceptado un millón de dólares de los negocios ilícitos del narco Joaquín El Chapo Guzmán .