China construye silos de misiles para armas nucleares cerca de frontera de Rusia, lo que puede amenazar territorio ruso de ataques de EE.UU., según un informe.
Conforme a un informe emitido este sábado por el portal ruso de aviación Avia.Pro, China ha construido cientos de silos de misiles para armas nucleares, que por el momento se conocen 110 lanzadores y 350 silos de misiles ubicados en la región de Xinjiang, al amparo de los territorios de los estados vecinos.
Según expertos, China ha instalado estos silos de misiles para armas nucleares cerca de Rusia sabiendo que EE.UU. no lanzaría ningún ataque al complejo, pues si agrede el territorio ruso, estaría amenazado con una ofensiva de represalia de Moscú.
“China ha decidido esconderse astutamente detrás del territorio de Rusia de cualquier ataque estadounidense, al darse cuenta de que es poco probable que Washington se arriesgue a atacar debido al peligro de agresiones accidentales en el territorio de Rusia y los estados vecinos”, revela el texto, citando a expertos.
No obstante, la construcción de silos de misiles para armas nucleares cerca de la frontera de Rusia plantea una cierta amenaza para el país euroasiático en el caso de posibles ataques nucleares del país norteamericano en la referida zona, debido a que existe un riesgo muy grave de que el territorio ruso también sufra de tales ofensivos, tal como sostuve el informe.
En otra parte del texto, el medio ruso aborda el poder de China, haciendo hincapié que, según un análisis de especialistas, Pekín bien puede utilizar un complejo de instalaciones con el fin de realizar ataques en todo el territorio estadounidense, sin embargo, objetivos clave estarán ubicados en la costa este de EE.UU.
Este informe se ha publicado mientras Washington y sus aliados occidentales temen el rápido avance en las capacidades del gigante asiático y el creciente fortalecimiento de la potencia militar china.
En este sentido, Pekín ha logrado muchos avances en la tecnología de armas en los últimos años y su arsenal ya incluye más de 200 ojivas nucleares, pues quiere alcanzar lo que considera un “mínimo disuasivo nuclear creíble”. Con todo esto, ha dejado claro en varios casos que no será el primero en usar armas atómicas en un conflicto.