Gobierno alemán llama a la población a prepararse para una larga crisis de energía

Berlín. El canciller alemán, Olaf Scholz, advirtió ayer a sus conciudadanos que será necesario adoptar medidas contra la escasez de energía más allá del próximo invierno.

“Estos días nos preocupa la seguridad de nuestro suministro energético. Y así será durante las próximas semanas, meses e incluso años”, expresó el jefe de gobierno en un mensaje de video.

Scholz subrayó que el gobierno ha tomado muchas decisiones en corto tiempo para que Alemania esté bien preparada “para la escasez, por ejemplo en lo que respecta al gas”.

“Estamos construyendo ductos, terminales de gas natural licuado. Nos aseguramos de que el combustible se almacene en nuestros depósitos. Y nos aseguramos de que las centrales eléctricas de carbón se utilicen ahora para que podamos ahorrar gas”, destacó.

El pasado lunes, el canciller advirtió que la población debía alistarse para una larga crisis energética con precios elevados.

El ministro alemán de Economía, Robert Habeck, advirtió que la ciudadanía debe considerar, aunque no suceda, el peor escenario en cuanto al suministro del energético ruso.

“Todo es posible. Puede pasar cualquier cosa. Es posible que el gas vuelva a fluir, incluso más que antes”, indicó el político de Los Verdes a la emisora Deutschland-funk en alusión al inminente corte de suministro de gas ruso por razones de mantenimiento en el gasoducto Nordstream 1.

Si este escenario se hace realidad, Habeck pronosticó que se generarán acalorados debates. “También sobre mi ministerio, sobre mi persona”, aclaró quien es uno de los políticos más populares en las encuestas. “Esto someterá a Alemania a una prueba que no hemos tenido durante mucho tiempo”.

Sin embargo, subrayó que el Ejecutivo actuará para paliar la situación social y precisó que lo hará en el marco de la llamada “acción concertada”, un formato de diálogo social en el que el canciller Scholz aborda la crisis junto con sindicatos y empleadores.

Los precios del combustible seguirán siendo altos, alertó el director de la Agencia Federal de Redes de Electricidad, Gas, Telecomunicaciones, Correos y Ferrocarriles, Klaus Müller, en entrevista con la revista de noticias Focus.

Añadió que las consecuencias de la actual escasez de gas aún no han llegado a los consumidores en términos de precios. “Para una familia, esto puede suponer rápidamente una carga adicional de 2 mil 40 a 3 mil 50 dólares al año. A menudo no será posible costear el próximo viaje de vacaciones”.

El presidente de la Asociación de Cámaras de Industria y Comercio alemanas, Peter Adrian, alertó también de que el corte del suministro de gas podría provocar una recesión. Adrian no descarta que ante esta situación la producción económica pueda caer incluso 10 por ciento o más durante los meses de invierno (europeo). Por ello, instó al gobierno federal a que levante las restricciones para quelas empresas puedan utilizar alternativas a la energía del gas.

En tanto, la iluminación nocturna de la famosa Puerta de Brandeburgo y otros edificios emblemáticos de Berlín podría reducirse para ahorrar energía, propuso el jefe de la bancada parlamentaria del Partido Liberal en el Parlamento regional berlinés, Sebastian Czaja. (Agencias)