Por Jesús Antonio Fernández
Hay muchas incongruencias en esto de la gestión del bicho. No soy un experto pero veo que, por ejemplo, por dar un caso, cerrar gimnasios privados y mantener los gimnasios municipales abiertos, no veo que sea algo muy lógico.
Y si no que expliquen, que nos den razones o motivos por lo que es así. Son expertos, pero la noticia tiene que ser entendida por todo el mundo. Parece un escarnio hacia el sector. Los gimnasios son salud.
¿Hay algún tipo de burbuja aislante de los gimnasios municipales o en los bares ? ¿Quién va a quedar aquí para trabajar ? ¿ Quién va a poder soportar esto ? Parece que quieren destrozar a todos los empresarios pequeños o autónomos.
Porque en un local de ocio se pegue la gente una fiesta de la hostia y se contagien, ahora después a cerrar toda la ciudad. Lo coherente sería que los infectados a un lado, encerrados, y los que no estamos infectados que sigamos activos.
Son pequeños empresarios que se dejan la piel dia a dia y por qué tienen que cerrar. Parece un esperpento de situación. ¿Alguién va a dimitir por esta situación? ¿Quién, cojones, toma las decisiones?
La vida ahora no está para fiestas. Se sabe que en una fiesta nocturna la distancia no se va a mantener, la gente va a acortar las distancias. Para eso no hace falta ser virólogo ni ningún experto.
La gente que tiene que ayudarnos, porque para eso le pagamos y están ahí, lo único que hace es meternos palos en las ruedas.