Caso ruso: Inteligencia de EEUU cae en sus propias redes

Por Javier Benítez

 Comprobado. La influencia rusa en las elecciones de EEUU en 2016 a través de sus principales redes sociales no existió: Twitter y Facebook confirmaron que los «anuncios electorales rusos» fueron residuales: el 0,74% y el 0,004% de sus respectivos contenidos. Mientras, sin números, Google fue igual de contundente: no hay evidencia de manipulación.

Qué pasa

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Fue lo que le ocurrió a la Inteligencia de EEUU en su enésimo vano intento de acusar a Rusia de injerencia en las elecciones presidenciales de 2016. Google, Facebook y Twitter desmintieron a la inteligencia norteamericana.

«Nuestra investigación no ha encontrado evidencia de la manipulación de nuestro plataforma ni de violaciones de nuestra política».

Es lo que reza el informe de los resultados de la investigación de Google sobre seguridad y desinformación durante las elecciones presidenciales de EEUU en 2016 mediante sus plataformas y servicios, donde figura la cadena RT en relación con el uso de YouTube.

El consejero general de Google, Kent Walker, y el director de Aplicación de la Ley y Seguridad de Información de la misma compañía, Richard Salgado, hicieron público el documento.

Mientras, en su testimonio escrito para el subcomité de Crimen y Terrorismo del Comité Judicial del Senado de EEUU, el asesor general de Facebook, Colin Stretch, señaló que durante dos años en esa red social hubo unas 80.000 publicaciones de procedencia rusa vinculadas a las últimas presidenciales de EEUU, y que constituyeron un 0,004% del contenido que los usuarios ven de manera general en su sección de noticias. Dicho de otra forma, uno de entre 23.000 avisos que reciben en la plataforma.

También cantó el pajarito de Twitter: estimó la actividad de las cuentas relacionadas con Rusia en alrededor de 1,4 millones de tuits automatizados sobre dichos comicios, que constituyeron menos de un 0,74% de todos los tuits sobre las elecciones. Los números no mienten.

Respecto a esta situación, el analista militar Gustavo Morales Delgado opina en primer lugar que «lo que ocurre es que en las redes sociales se puede expresar todo el mundo y sobre todas las cuestiones. Y la elección del presidente de EEUU no es algo que sea ajeno a nadie del planeta. Un nigeriano se va a ver afectado por quien sea el presidente de EEUU, un español, un ruso, un chino. Es decir, que es absolutamente opinable las elecciones en EEUU».

«La segunda parte y más importante es que  nos demuestra una vez más que a pesar de lo que nos cuentan del mercado libre, en EEUU existe una dirección política de la economía. Es decir, está presionando a sus propias empresas, a sus multinacionales, para que expresen el pensamiento de la Casa Blanca y no pensamientos críticos con respecto a EEUU».

Y es que le pasado 26 de octubre, y previo a presentar su informe sobre la «huella rusa», Twitter anunció su decisión de bloquear toda la publicidad de las cuentas pertenecientes a los medios rusos RT y Sputnik.

Algo a lo que reaccionó la directora de ambos medios, Margarita Simonián: «Nunca pensé que Twitter estaba bajo control de los servicios secretos de EEUU, me parecía que era una teoría de la conspiración, pero Twitter acaba de reconocerlo», apuntó.

Para Morales Delgado, todo esto «demuestra también que (en EEUU) la libertad de expresión es según para qué, y para quienes, y en el ‘para quienes’ entra de nuevo el fantasma ruso, ese ‘terrible ogro’ al que debemos temer porque va a devorar al mundo. Y va a devorar el mundo poniendo unos cuántos tuits o unos cuántos anuncios en Facebook».

«Es realmente ridículo y absurdo que las autoridades de EEUU estén en la persecución de estas cuestiones, y máxime en el tema electoral. (…) Esto demuestra una vez más que EEUU no está a favor de la libertad de expresión ni del libre mercado. EEUU está a favor de una dirección política de la economía, y de un control exhaustivo y censor de los medios de comunicación como en los mejores tiempo de Joseph Goebbels», concluye Gustavo Morales Delgado.

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