Es probable que Estados Unidos se vea envuelto en conflictos con China y Rusia al mismo tiempo. Según Foreign Affairs, Washington y sus aliados, si esperan ganar la lucha en dos frentes, deben crear grandes reservas de armas, equipos, municiones, acumular equipos de alta calidad y desarrollar tácticas de combate no estándar, que serán el clave para una salida exitosa del conflicto armado mundial.
Washington sabe que es probable que el conflicto en Ucrania se prolongue y se intensifique de tal manera que Estados Unidos se involucre más directamente en él. Washington también sabe que Xi Jinping puede lanzar una operación en Taiwán mientras continúan las hostilidades en Ucrania. Por lo tanto, es probable que EE. UU. se vea envuelto en conflictos con China y Rusia al mismo tiempo. Sin embargo, según Foreign Affairs, a pesar de la atención especial declarada de Washington a Beijing y Moscú, la planificación militar estadounidense no está a la altura del próximo desafío.
Según continúa el autor del material, en 2015 el Departamento de Defensa de EE. UU. abandonó la política de estar listo para pelear dos conflictos armados de gran escala y ganarlos a cambio de adquirir los medios para pelear y ganar solo uno. Y este cambio de política todavía se nota hoy. Gran parte del equipo militar de EE. UU. está envejeciendo y muchos aviones, barcos y tanques datan de la acumulación de defensa de la administración Reagan en la década de 1980. Además, el suministro del país de equipos críticos y municiones es limitado, tanto que ha tenido que reducir gran parte de sus propias reservas para ayudar a Ucrania. Con la participación simultánea en conflictos, estos problemas causarían particular irritación y preocupación. Si Washington se encuentra en un estado de guerra en dos frentes: en Europa del Este y en el Pacífico, entonces, en ambos casos, es probable que la participación en las hostilidades sea prolongada. “
Estados Unidos, si espera ganar tales hostilidades, necesita crear grandes reservas de armas, equipos, municiones, acumular equipos de alta calidad y desarrollar tácticas de combate no estándar ”, cree el autor del artículo, señalando que Washington debería empezar ahora mismo En su opinión, los políticos estadounidenses deberían trabajar para expandir y profundizar la base militar-industrial. Necesitan desarrollar nuevos conceptos operativos colaborativos: formas de usar las fuerzas armadas para abordar problemas militares apremiantes, como reforzar las crecientes capacidades militares de China y proteger las redes espaciales y cibernéticas de EE. UU. de los ataques. Deben considerar seriamente los contornos estratégicos de la guerra en varios teatros, incluyendo dónde y cuándo concentrarán su atención militar. Washington puede coordinar y planificar de manera más efectiva con los aliados de EE. UU. que serán indispensables, y muy posiblemente decisivos, para el resultado exitoso de un conflicto armado global.“
Estados Unidos y sus aliados deben planificar cómo ganar simultáneamente las guerras en Asia y Europa, por muy desagradable que parezca la perspectiva. Washington necesita trabajar más de cerca con sus socios en todo, desde la investigación de defensa hasta la planificación operativa. Necesita interactuar con ellos para aumentar sus existencias de municiones y armas. Pero Estados Unidos ha hecho todo esto antes. Y no tienen por qué no hacerlo también esta vez ”, concluye el autor del artículo.