El mundo sigue hundiéndose bajo montañas de basura (y no hacemos nada): vídeo impactante

En 2017, el vídeo rodado por la ecologista norteamericana Alison Teal publicado por Sputnik incendió las redes. Un año después, el equipo de la activista sigue despertando la conciencia sobre el ‘apocalipsis de basura’ que nos acecha.

El primer vídeo sobre la situación ecológica de México causó tanto revuelo que muchos seguidores incluso dudaron de su veracidad. En aquel entonces, la ecologista acudió a Sputnik para aclarar los detalles y concienciar a los lectores del problema.

Ahora, Alison Teal y el grupo conservacionista Orca365 llegan con un par de soluciones que pueden ayudar a disminuir el tamaño del desastre.

En su nueva obra, Alison va más allá y revela unos paisajes muy similares de cuatro regiones geográficamente muy lejanas: California (EEUU), México, Bali (Indonesia) y las islas Maldivas:

Las imágenes evocan un sentimiento apocalíptico. La basura va cubriendo islas enteras, formando ‘montañas’ y ‘llanuras’ de plástico. E incluso si las autoridades locales toman algunas las medidas —lo que no siempre es el caso—, el problema no desaparece sino que cambia de forma.

Como individuos, apunta Tiel, todos podemos tomar medidas para dejar de usar el plástico de un solo uso hoy y comenzar a utilizar productos que sean saludables y ecológicos, como las botellas de agua Mobot que funcionan como rodillos de espuma de masaje y los sistemas de comedor sin desechos Zoetica.

«Elijo reemplazar aproximadamente 200 botellas de agua de plástico al año usando una botella de agua Mobot», agrega Teal. «Debido a que más del 40% del plástico se usa una sola vez, llevo una bolsa de Zoetica con artículos reutilizables como pajitas, utensilios y tazas».

Destaca, además, que por ejemplo, no se puede simplemente quemar el plástico ya que esto libera en la atmósfera unas toxinas muy nocivas:

«Durante mis sumersiones en el agua, las bolsas de plástico literalmente iban cubriendo mi cara, y sobre la superficie el humo nocivo abrasaba mis pulmones mientras caminaba por unos paisajes apocalípticos», atestigua la ecologista.

Mientras varias organizaciones y la población local están contribuyendo a un cambio positivo, y hay países enteros como Chile, Costa-Rica y otros, dispuestos a prohibir el uso de productos plásticos desechables, a escala global se requiere hacer mucho más.

En cuanto a la región de Tulum, protagonizada en los vídeos de la ecologista, desde el año pasado no ha habido cambios para bien. Según comentó a Sputnik Sam Meacham, el director del Centro Investigador del Sistema Acuífero de Quintana Roo, A.C. (CINDAQ A.C.), la situación sigue siendo la misma:

«Desde que Alison llegara el año pasado, la situación no ha cambiado. Con los recientes cambios políticos en el municipio de Tulum tenemos la esperanza de que el tema del tratamiento de desechos salga adelante. Se requiere voluntad política, y una continua presión pública para evocar un cambio real», valoró el investigador.

La propia Teal teme que sin un esfuerzo determinado global, «nuestro planeta esté cerca de quedar totalmente sofocado por el plástico».

El tamaño de la catástrofe

Se estima que para el 2050, el volumen de plástico en los océanos pesará más que todos los peces que los habitan, juntos.

El uso excesivo de botellas de plástico y utensilios desechables en EEUU ya llevó a que en el organismo de un 93% de los niños mayores de seis años en el país se registrara la sustancia bisfenol A (BPA), un compuesto orgánico proveniente de plástico nocivo para los humanos y vinculado a las causas de las enfermedades cardíacas y del hígado, así como la diabetes.

Un 91% de los deshechos de plástico en el mundo no llega a reciclarse. Cada año, 8 millones de toneladas de plástico acaban en los océanos.

Y los ritmos de producción de los productos plásticos son abrumadores: un millón de bolsas y otro millón de botellas de plástico se venden cada minuto.

«Tenemos que buscar alternativas para el uso cotidiano de materiales plásticos para salvar los océanos, la vida acuática y los arrecifes de la devastación. Paso a paso, se pueden elaborar medidas a gran escala para acabar con la producción de plástico desechable», insiste Alison Teal.

La ecologista sostiene que mientras los Gobiernos del mundo ignoran el problema o debaten una postura común, cada uno puede hacer su aporte personal al rechazar usar bolsas, botellas y utensilios de cocina hechos de plástico en favor de los equipos multiuso.

 

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