LONDRES (Reuters) – Irán mantuvo el miércoles su oposición a las demandas estadounidenses de un cambio radical en su política exterior y programa nuclear, mientras que Damasco, aliado de Teherán, desestimó abiertamente la petición de Washington de un retiro de las fuerzas iraníes de Siria.
Francia, una de las potencias europeas disgustadas por la salida de Estados Unidos de un acuerdo nuclear de 2015, declaró que la actitud de Washington de imponer más sanciones a Teherán apoyaría los argumentos del sector de línea dura que domina el país.
El lunes, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, amenazó con imponer las “sanciones más duras de la historia” contra Irán, si los líderes de ese país no cambiaban el curso de su influencia regional, acusando a Teherán de apoyar a grupos armados en países como Siria, Líbano y Yemen.
Pompeo realizó esas declaraciones dos semanas después de que Estados Unidos se retirara de un acuerdo internacional que había levantado sanciones a cambio de que Irán redujera su programa nuclear. Las potencias europeas consideran que el pacto es la mejor forma para evitar que Teherán adquiera armamento nuclear.
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohammad Javad Zarif, afirmó el miércoles que Pompeo había repetido acusaciones viejas contra Teherán “sólo con un tono más fuerte”.
El general de división Mohammad Bagheri, funcionario militar iraní de alto rango, aseguró que Irán no cedería ante la presión de Washington para limitar sus actividades militares.
“Este enemigo (Estados Unidos) no tiene la valentía para el enfrentamiento militar y para la guerra cara a cara con Irán, pero está tratando de poner presiones económicas y mentales sobre la nación iraní”, dijo Bagheri según declaraciones recogidas por la agencia de prensa IRNA.
En Damasco, el viceministro de Relaciones Exteriores sirio Faisal Mekdad desestimó la noción de una salida de las fuerzas iraníes.
“Sea que las fuerzas iraníes o Hezbollah se retiren o se queden en Siria no es materia de discusión porque es asunto del gobierno sirio”, dijo Mekdad, según lo citó el canal libanés al-Mayadeen TV.