Hábitos asesinos que acortan su vida lentamente

Incluso si no fuma, siempre hay hábitos que debe plantearse abandonar para alargar su vida y mejorarla, como por ejemplo, dormir insuficientemente o dejar de tomar el sol.

Fumar provoca enfermedades cardiovasculares, daña los pulmones, el cerebro, etc. Pero hay otros malos hábitos de los que se habla menos y no son menos dañinos o quizá peores que un cigarrillo después de la cena, informa Popmech.

Aquí tenemos una lista de los principales:1.       Soledad

La ausencia de vínculos sociales puede reducir la esperanza de vida igual que el hábito de fumar 15 cigarrillos al día. La psicóloga Julianne Holt-Lunstad también colocó la soledad por encima de la obesidad por su potencial dañino para el organismo.

2.       Vida sedentaria

La silla de oficina es el principal enemigo de la salud urbana. Según un metaestudio de 2014, cuanto más tiempo pasa una persona sentada o acostada, mayor es el riesgo de desarrollar una variedad de enfermedades.

Independientemente de si hace deporte en su tiempo libre, una silla, un sofá y un sillón continúan matándolo mientras descansa o trabaja.3.       Insuficiencia de sueño

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU y confirmado por la OMS, la falta de sueño aumenta el riesgo de ataque cardiaco y accidente cerebrovascular y es casi tan peligroso para los vasos sanguíneos como el tabaquismo.

4.       El sol y los rayos UVA

El peligro del exceso de los rayos UVA hace tiempo se asociaba con el elevado riesgo de padecer cáncer. En 2014, los investigadores de la Universidad de California estimaron que los rayos UVA provocan cáncer de piel con más frecuencia que el tabaquismo.

5.       Una dieta insuficiente y poco equilibrada

La OMS considera no menos peligroso que los cigarrillos el azúcar, los alimentos enlatados o las grasas saturadas. Según confirmó un estudio de 2016 las dietas poco saludables matan a más personas en todo el mundo que el alcohol, el tabaco y los efectos del sexo sin protección combinados.Aparte de estos hábitos, hay otros especialmente perjudiciales para el cerebro que dependen menos de nosotros como la contaminación del aire —pues si al cerebro le falta oxígeno, su actividad se hace mucho más lenta-, o la falta de estímulos y desarrollo por lo cual es preferible leer un libro o jugar al ajedrez que ver la televisión.

Asimismo, la locuacidad y la conversación es un excelente ejemplo de estimulación cerebral y de constante actividad.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

4 × cinco =