El operativo fue realizado en una residencia ubicada en la calle Padre Santa Ana, y fueron apresados los dominicanos Pastora Sosa, dueña del local, y su hijo, Jonisol Rodríguez.
A Sosa y a Rodríguez se les acusa de formar una presunta asociación de malhechores que se dedican a albergar a indocumentados clandestinamente, para su posterior traslado a otras ciudades del país.
Los criollos detenidos están siendo investigados por el Departamento de Investigaciones Criminales (DICRIM), en el destacamento de esta ciudad para someterlos a la justicia.
Mientras que los haitianos indocumentados se encuentran en el Centro de Acogida de la Dirección General de Migración (DGM) para posteriormente devolverlos a su país.
La operación fue realizada por miembros de la DGM, del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (CESFRONT) y del DICRIM.